Análisis técnico
El IFE tendría que instalar 34 juntas ejecutivas
Con la modalidad prevista en la minuta por la cual los diputados aprobaron el voto de los mexicanos en el extranjero, el Instituto Federal Electoral (IFE) tendría que instalar 34 juntas extraordinarias ejecutivas fuera del país -lo que implicaría más del doble de las 32 que actualmente operan en territorio nacional-, principalmente en Estados Unidos, para poder organizar los comicios en los que votarían los connacionales que radican en otros países.
Así se desprende del documento técnico que los consejeros del IFE entregaron al Senado para su estudio y análisis, en el cual se advierte: "Es importante referir que se contemplaría la instalación y el funcionamiento de las juntas extraordinarias ejecutivas en el extranjero a partir de mayo de 2005, ya que por tratarse de una experiencia nueva en casi todos los aspectos propios de un proceso electoral, implicaría el conocimiento de un territorio nuevo.
Asimismo, según señala el texto, se deben "determinar distancias y complejidad; difusión del proyecto entre los ciudadanos residentes en el extranjero; identificación de lugares para ubicar las casillas y centros de votación; contratación de personal y planeación de actividades del Registro Federal de Electores, en virtud de que la lista nominal de electores iniciaría su elaboración en junio del 2005".
Destaca que la campaña de difusión institucional para promover el voto en el extranjero, la capacitación electoral y la incentivación para inscribirse en el padrón implicaría un costo de 310 millones de pesos, con la salvedad de que los trabajos preparatorios para su diseño deberían comenzar este mes.
Al desglosar la forma en que se distribuirían los 3 mil 557.9 millones de pesos que costaría el ejercicio electoral para 10 millones de electores residentes fuera del país, el documento considera una partida de mil 742 millones para la organización, 72 por ciento de los cuales se haría con cargo al presupuesto 2006; 805.7 millones para el Registro Federal de Electores, de los cuales 559.9 millones se ejercerían este año, y 676 millones de pesos para la capacitación, que serían ejercidos en su totalidad el próximo año. Tan sólo la partida asignada al registro de electores implicaría casi el triple del dinero que el Congreso de la Unión asignó este año para la preparación de las elecciones en el extranjero. En este capítulo se incluyen gastos de empadronamiento y credencialización -cuyo costo total en 2005 y 2006 sería de 560 millones de pesos-, aviso y notificación para ser registrados en la lista nominal especial del extranjero, la verificación muestral y la integración de delegaciones y subdelegaciones.
En el ámbito de la organización electoral la operación de las 34 juntas extraordinarias implicaría para el IFE un gasto de 807 millones de pesos, poco menos de la mitad del total del gasto en este rubro, que se ejercería prácticamente en partidas similares para 2005 y 2006.
Más adelante, al ejemplificar el desequilibrio que existe entre las funciones de cada una de las juntas extraordinarias ejecutivas, el documento del IFE realiza un comparativo entre Los Angeles, California, y Wake, en Carolina del Norte: en este último caso la junta extraordinaria ejecutiva debería revisar los resultados de 31 casillas donde podrían votar potencialmente 19 mil 200 mexicanos.
En contraste, la junta en Los Angeles, donde se concentraría un universo potencial de 2 millones 669 mil electores, debería procesar 3 mil 557 casillas. Para el IFE esto muestra la disparidad logística en la organización de los comicios, lo que necesariamente impactará en la rapidez para dar a conocer resultados.
"Nos complicaría la existencia": TEPJF
Por su parte, el magistrado presidente del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, Eloy Fuentes Cerda, reconoció que de aprobarse el voto de los mexicanos en el extranjero "sin duda nos complicaría un tanto cuanto la existencia, porque hay que imaginar un medio de impugnación presentado fuera del país; el hecho de que nosotros pudiésemos tener jurisdicción para conocer de alguna situación irregular que se presentó fuera de territorio nacional sería un tanto complejo".
Por otro lado, consideró conveniente no sólo para los partidos políticos, sino para la vida nacional, que éstos pudieran alcanzar un acuerdo de civilidad con miras a los comicios federales de 2006, porque se están viviendo momentos "muy apasionados".
Sin embargo, apuntó que no existe obligación alguna, porque no se considera en ninguna legislación que se deba celebrar este tipo de pactos. "
-¿No se han pasado de esa pasión?
-Ni siquiera hemos iniciado el proceso. En la mayor parte de los países la política siempre va a ser apasionante y apasionada.
-¿Las instituciones electorales pueden soportar toda esta presión?
-Creo que la han soportado y han dado muestras de esa fortaleza.
De visita en el Instituto Electoral del Distrito Federal para entregar reconocimientos, Fuentes Cerda aludió a la discusión sobre el voto de los mexicanos en el extranjero. Señaló que hasta ahora no ha sido convocado formalmente para acudir al Senado de la República, pero adelantó que si bien habría complicaciones, esto no colocaría en crisis a la institución porque estarían obligados a aplicar la ley previo análisis particular de cada uno de los casos.
-¿Realizaría un llamado para que el Senado se apresure a aprobar la iniciativa correspondiente?
-No, no haría ningún llamado a nadie; no es mi función hacer llamados.