Sólo 12 tiendas se han consolidado, reconoce el fondo
A cinco años de su creación, las franquicias Fonart no despegan
Este sexenio se han impulsado las franquicias en el Fondo Nacional para el Fomento a las Artesanías (Fonart) en busca de mejorar la situación económica de los artesanos pobres del país. Se pretendía contar con más de 20 para 2006, pero sólo 12 se han podido consolidar, en principio porque no hay surtido suficiente para hacer frente a las demandas de las tiendas, además de que, de acuerdo con información proporcionada, no han podido despuntar.
Para elaborar el contrato respectivo se pagó alrededor de un millón de pesos a una firma externa y hasta la fecha sólo se han obtenido por esta vía ingresos por 2.5 millones, 1.5 millones de los cuales se obtendrían por la venta de artesanías que les hizo Fonart a los franquiciatarios.
El esquema comenzó en 2001. El concepto de franquicias lo desarrolló la empresa Gallástegui, Armella y Asociados. De acuerdo con los datos, Fonart vende alrededor de 26 millones de pesos al año, pero no hay un desglose para conocer cuánto entra por esta vía. Todo se incluye en un solo renglón.
Los informes de la institución reflejan que, al tercer trimestre de 2004, por concepto de compras se beneficiaron directamente 4 mil 512 artesanos, 30.83 por ciento menos que el mismo periodo del año anterior, y que disminuyó el número de grupos étnicos beneficiados, al pasar de 17 a 15.
Fonart creó hace prácticamente cinco años el concepto de franquicias Ciento por ciento México. Hecho a mano, como una opción para abrir nuevos canales de comercialización para la artesanía mexicana en los mercados nacionales e internacionales, teniendo como propósito la difusión y promoción del objeto artesanal mexicano.
Pero, de acuerdo con un reporte a septiembre del año pasado, la instancia no está posicionada como marca a escala internacional, padece problemas de abasto en algunas piezas (el catálogo contiene alrededor de 580), en específico los relativos al abastecimiento regular, por el financimiento que se les hace a los artesanos, y requiere consolidarse en centros turísticos como Los Cabos, Puerto Vallarta, Cancún, Ixtapa Zihuatanejo y Veracruz.
La duración del contrato es por 10 años. Se considera que como inversión inicial se necesitan entre 50 y 60 mil dólares -12 mil 500 nada más por el nombre- y la adaptación de un local de 50 a 60 metros cuadrados.
Como responsable del manejo de las franquicias desde la Secretaría de Desarrollo Social, Santiago Toledo Teja elaboró recientemente un informe donde habla de la situación actual que guardan las mismas. De ocho que están operando, ninguna tiene adeudos de cuotas o mercancía, y menciona a cinco con contrato y en proceso de arranque, la mayoría en espera de contar con el local apropiado.
Además, afirma que hay cartas de intención para operar en España, Alemania, Suecia, Dallas, Nueva York, Los Cabos y San Francisco. Pero en ningún momento habla de la ubicada en Villafranche, Francia, cuya apertura se dio en 2004 y donde aparentemente, según versiones en el Fonart, la ex directora Rosa María Rojas habría tenido un interés particular.