Si no se corrigen vicios habrá retroceso en materia electoral: Sauri y Roque Villanueva
Senadores del PRI exigen a Madrazo transparencia en elecciones internas
La dirigencia debe apegarse a la legalidad para evitar que se vayan cuadros valiosos
Ampliar la imagen Dulce Mar�Sauri se manifest� desacuerdo con la dirigencia nacional del PRI FOTO Archivo La Jornada
La relación entre el presidente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Roberto Madrazo Pintado, y los senadores del tricolor es difícil, y "con (las) descalificaciones" la situación sólo empeorará, advirtió Dulce María Sauri Riancho. En tanto, Humberto Roque Villanueva señaló que de no corregirse los vicios e irregularidades en los procesos internos para elegir candidatos, habrá retrocesos en materia electoral.
Ambos aclararon que el problema no es por las diferencias entre el coordinador de los senadores, Enrique Jackson Ramírez, y Madrazo -ambos aspirantes a la candidatura presidencial del PRI para 2006-, sino por la ilegalidad y la falta de democracia interna que han imperado en la elección de los abanderados priístas a puestos de elección popular, sobre todo en el caso de las gubernaturas, porque además no se han querido escuchar las inconformidades y los llamados a revisar los procesos.
Sauri señaló que está en desacuerdo con la actitud de la dirigencia de obligar, prácticamente, a salir del tricolor a los militantes que se inconformaron por alguna irregularidad. "Yo no creo en un PRI donde se dice: 'todo aquel que no esté de acuerdo conmigo, que se vaya'; ese no es el partido democrático que debemos presentar a la ciudadanía".
La ex dirigente nacional del tricolor recalcó que las diferencias no son sólo por el caso Nayarit, por el que se obligó al senador Miguel Angel Navarro a dejar el PRI. Fue el detonante, explicó, pero hubo situaciones similares en Quintana Roo, cuando también se orilló a salir del partido a Addy Joaquín Coldwell y otros más.
Consideró que se debe hacer una revisión de los intentos de varios senadores de ser postulados, que quedaron frustrados o que ni siquiera pudieron materializarse en un proceso abierto. Mencionó el caso de Campeche, donde no se permitió participar en la contienda interna a dos integrantes de la bancada priísta para elegir candidato a la gubernatura.
"El caso más reciente es el de Nayarit. Ahí se comprueba el dicho de que si es senador, háganlo a un lado para que no participe. Son muchas cosas que se van sumando", agregó Sauri, e insistió en que si se pretende seguir "en la senda de la descalificación, vamos a entrar a una zona de riesgo cada vez mayor".
La decisión del senador Navarro Quintero de dejar el PRI para buscar una candidatura ciudadana, "es una llamada de atención muy fuerte y ojalá así lo asuma la dirigencia del partido, con toda seriedad y humildad, para poder retomar el camino y evitar que lo ocurrido en Nayarit se reproduzca en 2006".
A su vez, Roque Villanueva consideró que la dirigencia nacional que encabeza Madrazo debe tener una actitud más abierta y apegada a la legalidad para que no se vayan cuadros tan valiosos como Navarro Quintero.
Entrevistado por separado, el senador Genaro Borrego Estrada señaló que hay otros ejemplos en los cuales se nota, de parte de la dirigencia priísta, "cierta hostilidad, desdén, desprecio, e inclusive hasta descalificación, a todo lo que provenga del grupo parlamentario en el Senado".
Lo ocurrido en la reciente 19 asamblea del PRI puso de manifiesto que no hay definición en cuanto al proyecto nacional, agregó. "Se vio claramente en el tema de los energéticos, que dividió a los priístas", agregó Borrego.
Dijo que la dirigencia nacional del PRI debe considerar que, "por un interés personal o de grupo, por legítimo que sea, se está afectando la unidad del partido, con el consiguiente peligro que esto significa para las aspiraciones del Revolucionario Institucional en 2006".
Sin embargo, la molestia que existe entre la dirigencia del PRI, por la severa respuesta de los senadores a la jugada de Madrazo de filtrar a los medios electrónicos la carta que de manera particular le hizo llegar Enrique Jackson -en la que pedía revisar el proceso interno en Nayarit- originó nuevas filtraciones.
El viernes por la noche, desde la sede priísta de Insurgentes se propaló el rumor de que Jackson estaba internado en el Sanatorio Español, a pesar de que el senador sinaloense estaba de viaje con su esposa.