Cae la de maíz y frijol y crece la de sopas instantáneas, reconoce Vázquez Mota
Venta en tiendas Diconsa refleja cambio de costumbres
La Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso) reconoció que mientras en los centros de abasto rural Diconsa se registra una caída en la venta de frijol, se produce una alza en la adquisición de sopas instantáneas en las comunidades más marginadas del país.
El año pasado el grano registró un decremento en sus importes de venta de por lo menos 12.3 por ciento. Las sopas aparecen en la lista de Diconsa como parte de los productos que fueron adicionados con vitaminas, proteínas y otros nutrientes. En comparación con 2003, durante los primeros meses de 2004 se adquirió 3.1 por ciento más de los mismos, para ser distribuidos en las más de 22 mil tiendas rurales del país.
La titular de Sedeso, Josefina Vázquez Mota, reconoció ante estudiantes de la Universidad Anáhuac que las ventas de frijol "se han desplomado, y las que han crecido son las famosas sopas instantáneas. Nos decían en la industria de la construcción -citó como ejemplo- que cuando firman el contrato los trabajadores piden horno de microondas. Les proporcionan buenos sabores, carbohidratos de rápida asimilación, y prepararlas les requiere de poco tiempo. En lugar de comer en lata y comidas frías, tienen un espacio caliente, mucho más limpio."
Pero también allí habló de una "nueva epidemia de obesidad y sobrepeso en el país", fenómeno que definió como un problema no de ingresos, "porque lo tenemos en pobres y ricos, sino derivado de una mala alimentación". En específico mencionó la comida chatarra y un mal consumo de propiedades nutricionales. La alimentación de los mexicanos, en promedio -afirmó-, está compuesta en 40 por ciento de carbohidratos y vegetales.
De acuerdo con información de Diconsa, encargada de operar las tiendas de abasto rural, se registraron caídas en las ventas de maíz, frijol y harina de maíz durante los primeros nueve meses de 2004, y la tendencia no se revirtió. Representaron, en comparación con el mismo periodo de 2003, bajas de 18.8, 12.3 y 8.8 por ciento, respectivamente.
En el caso concreto del frijol, se adquirieron 15 mil 101 toneladas, por un importe de 81.6 millones de pesos. El volumen comprado fue 0.8 por ciento inferior a las 15 mil 223 toneladas programadas, y en importe, 19 por ciento inferior a los 100.8 millones de pesos presupuestados.
Según Diconsa, en ese mismo tiempo se negoció con proveedores para que se enriquecieran los productos que se distribuyen en las tiendas rurales con vitaminas, proteínas y otros nutrientes. De enero a septiembre del año pasado, 63.5 por ciento de las compras totales fue de artículos en dicha condición. En la lista aparecen las sopas instantáneas. Y su adquisición respecto a 2003 tuvo una variación de por lo menos 3.1 por ciento a favor, al pasar de 19 millones 161 mil 392.43 unidades a 20 millones 762 mil 226.44, y de éstos, según los datos, se enriqueció 10.2 por ciento.