Responde a intereses de las trasnacionales que hacen esas investigaciones, precisa
La declaración de la ONU, basada en ideas ligadas a la derecha: Merchant
Parece estar influenciada por pensamientos más relacionados con la religión: Iván Velasco
Necesario avanzar en los proyectos que utilizan células madre: Everardo Curiel
Ampliar la imagen El rector Juan Ram�e la Fuente, acompa� por Gilberto Borja Navarrete y Georgina Hern�ez, en el Centro de Ciencias Gen�as de la Universidad Nacional Aut�a de M�co FOTO Notimex
La declaración adoptada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en materia de clonación humana está basada en "ideas dogmáticas" ligadas a intereses de la derecha y de empresas trasnacionales que no quieren que en otros países se realicen esas investigaciones para que "posteriormente se las tengamos que comprar", expresó el científico del Instituto de Investigaciones Biomédicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Horacio Merchant.
Reveló que un grupo de investigadores mexicanos envió un documento a la Secretaría de Salud para manifestar su rechazo a esta posición que prohíbe todo tipo de clonación humana y ofrecer una sugerencia en la materia; sin embargo, "fue ignorada".
Prohibir la investigación científica con base en "ideas dogmáticas" limita el avance de esos estudios, "porque se acepta como verdad el punto de vista de un grupo religioso que no debe tener el poder de prohibir todo", manifestó.
El reconocido científico insistió en que no se trata de clonar seres humanos, sino células, "y no se destruye ningún embrión. No son más que células que potencialmente pueden ser embrión", precisó.
Merchant consideró que el texto de la ONU por el momento no tiene impacto en las investigaciones que se realizan en la materia, "porque no se trabaja con células humanas y menos embrionarias, sino con células madre de animales y, particularmente, de ratones".
"Doble moral"
Advirtió que en un futuro sí podría haber efectos en los trabajos que se realizan con fines terapéuticos, porque en un momento dado esos conocimientos "no se podrían aplicar a los humanos en razón de que está prohibido".
Señaló que el gobierno de Estados Unidos -principal promotor de esta declaratoria, a la que se alineó México- maneja una "doble moral", porque, por un lado, sostiene una política para prohibir estos estudios y, por otro, junto con la iniciativa privada, invierte millones de dólares en esas investigaciones.
En entrevista por separado, el investigador del Instituto de Fisiología Celular de la UNAM, Iván Velasco, consideró que los estudios sobre células madre y clonación terapéutica "van a seguir evolucionando, independientemente de la recomendación de la ONU".
Indicó que en el texto "parece haber influencias importantes de un pensamiento más relacionado con la religión que con la ciencia". Inclusive, apuntó que hay una coincidencia con grupos conservadores que se han manifestado en favor de prohibir todo tipo de clonación. "No sé si es casual o inducida", añadió.
Expresó que si se les consultara a los científicos mexicanos, en general se manifestarían en contra de dicho texto por "su forma tan ambigua" y porque los investigadores nacionales apoyan la clonación terapéutica, pero no reproductiva.
Por su parte, Everardo Curiel Quezada, académico de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas del Instituto Politécnico Nacional, afirmó que la decisión de la ONU sobre la clonación humana es correcta, pero es necesario avanzar en los proyectos que utilizan células madre con fines terapéuticos porque, explicó, estas células se pueden tomar de un organismo vivo y no crear uno ex profeso.
Sostuvo que resulta difícil disociar la polémica de consideraciones morales porque, explicó, nuestra cultura es "antropocéntrica". De allí la necesidad de que la investigación científica mundial se atenga al análisis de células madre y la creación de tejidos disponibles, desarrollo que "todavía es incipiente".
Más de un millón de dólares para investigación genómica
Por otra parte, la UNAM recibió un donativo de un millón 401 mil 896 dólares de la Fundación Gonzalo Río Arronte para adquirir nuevo equipamiento e incrementar la infraestructura para el estudio de las ciencias genómicas en el país. La universidad lleva la vanguardia en este campo en Latinoamérica.
El rector Juan Ramón de la Fuente y el director general de dicha fundación, Luis Gonzalo Domínguez Mota, encabezaron la firma de este convenio por el que el Centro de Ciencias Genómicas de la UNAM será el destinatario de estos equipos con tecnología de punta.
El coordinador de asesores de la rectoría, Jaime Martuscelli, precisó que entre los equipos que adquirirá la universidad destacan un secuenciador de DNA con sistema de detección en tiempo real y estación de trabajo automatizada, una estación para digestión de proteínas con equipo paralelo, que incluye cromatografía líquida multidimensional y dos servidores de alta capacidad para reforzar el área de cómputo.