El director del penal de Valle de Bravo cedió para volver a la normalidad
Se amotinan 20 reos en el estado de México y consiguen ser reubicados
Valle de Bravo, Mex., 9 de marzo. Aproximadamente 20 reos de alta peligrosidad se amotinaron en el penal de esta localidad y durante tres horas tomaron de rehenes a 10 guardias para exigir que se les reubique en otras cárceles del valle de México.
Las autoridades cedieron y por la tarde trasladaron a los procesados a las prisiones de Texcoco, Chalco, Neza Bordo y Santiaguito, este último en Almoloya de Juárez, como solicitaron.
José Vázquez Franco, director del centro penitenciario, admitió que la determinación de reubicarlos se tomó como medida precautoria para que el penal regresara a la normalidad, y que de los acontecimientos se dio parte al Ministerio Público para que actúe en consecuencia.
Aunque no se dio a conocer la identidad de los amotinados, se supo que se trata de secuestradores y homicidas que hace dos semanas fueron trasladados de penales de la zona conurbada a Valle de Bravo, como parte de las medidas de despresurización del sistema penitenciario, aplicadas por las autoridades mexiquenses.
La revuelta empezó cerca de las 11 horas, cuando 22 reos se organizaron en el patio principal del reclusorio para demandar su traslado a los penales de la zona metropolitana, toda vez que, según dijeron, haberlos reubicado les perjudica en su defensa y prácticamente quedan sin visitas familiares.
Diez de los 30 custodios quisieron someterlos, pero los delincentes los tomaron de rehenes para obligar al director del penal a cumplir con sus exigencias.
Una hora después de iniciado el conflicto arribaron 350 elementos del cuerpo Ases, de la policía del estado, con la intención de ingresar, poner orden y acabar el motín, pero el director solicitó que únicamente se reforzara la seguridad en el exterior, mientras él negociaba con los inconformes.
Tras dialogar durante una hora en el patio principal de la cárcel, el directivo cedió a las pretensiones de los internos y les firmó una minuta en la que se comprometía a reubicarlos esta misma tarde, promesa que fue cumplida puntualmente.
La Dirección de Prevención y Readaptación Social realizó los trámites necesarios para poder trasladar a los internos a los penales de Texcoco, Neza Bordo, Chalco y Santiaguito, en Almoloya de Juárez. A este último fueron llevados únicamente unos pocos de los presos amotinados.
El primer contingente de 10 reos salió cerca de las 2 de la tarde, custodiado por unos 30 policías estatales, y el segundo convoy, con 12 internos, abandonó el penal a las 16: 30 horas.
Este centro penitenciario cuenta con una población total de 342 internos, de los cuales casi la mitad son mujeres, según informó la Dirección General de Seguridad Pública de la entidad.