Si hay alguna ultraderecha, "yo no la traje al PAN"

Espino dio a bancadas líneas diversas sobre el desafuero

Descartó ante diputados ordenarles cómo votar, pero dijo a senadores que sólo él decidirá y debe ser acatado

El dirigente nacional del PAN, Manuel Espino Barrientos, informó a las bancadas panistas en la Cámara de Diputados y el Senado que la próxima semana tomará una decisión política sobre el proceso de desafuero contra el jefe de Gobierno capitalino, Andrés Manuel López Obrador. Aunque a los diputados les aclaró que no habrá línea del CEN para determinar el sentido de su voto, a los senadores les dijo el martes que en temas específicos él dará lineamientos que deberán ser acatados.

Por la mañana, en San Lázaro, declaró que en el tema del desafuero los panistas deberán "respetar la legalidad, y el criterio es que se resuelva en función de lo que dictamine la sección instructora", postura que contrastó con la definida el martes, durante una reunión con los senadores, pues según distintas versiones de éstos, les puntualizó que él será quien decida y los diputados deberán acatar la orden.

Después de una reunión de casi tres horas con los diputados, Espino informó que será hoy cuando designe al nuevo coordinador, una vez que haga el cómputo de las boletas que él mismo llevó al cónclave, y en las que cada legislador anotó además las razones de su voto por el candidato de su preferencia.

Trascendió que sólo hubo dos aspirantes fuertes: el encargado del grupo, Germán Martínez Cázares -quien afirmó que en este proceso "no llegará la sangre azul al río"-, y José González Morfín. El dirigente acotó que la designación dependerá de una "decisión personalísima", en la que sólo contará "la experiencia y el compromiso institucional" del elegido. "No hay nadie vetado, no soy de los que descalifican", declaró.

En amplia conferencia después de la reunión, expresó su disposición a presentarse a declarar ante la PGR si es requerido para aclarar por qué el número de teléfono de sus oficinas, en la sede nacional panista, aparecía en el registro de números marcados por Nahúm Acosta Lugo.

Expresó por otra parte su satisfacción porque, argumentó, ninguno de los presidenciables del PAN le ayudó a ganar la dirigencia del partido, y minimizó los alcances del encuentro, el lunes pasado, con Marta Sahagún, con quien "no había alguna aspereza que limar". En este punto se apoyó en Martínez Cázares, quien tenía el rostro desencajado: "No sé si recuerdas alguna, Germán. No recuerdo ninguna expresión de animadversión" con la esposa del presidente Vicente Fox.

También se molestó ante la pregunta de que con él la ultraderecha se apoderó de Acción Nacional. "Si acaso hay alguna, ya estaba cuando llegué hace 27 años. Yo no la traje al PAN, yo no vengo de la ultraderecha, y si alguien me acusa que soy de ultraderecha, ¡que me lo demuestre! Yo he navegado en las aguas de la política mexicana en el barco del PAN, y en sus rincones nunca he visto una ultraderecha. Si alguien la ha visto, ¡por el amor de Dios, que me diga dónde está!"

Antes, en la plenaria, Espino ofreció una disculpa a los diputados si, durante el proceso interno, los ofendió. Francisco López Mena sostuvo que, en efecto, el nuevo dirigente incurrió en algunas afrentas, pero aceptó las disculpas.

Al llegar al tema del desafuero, Espino sostuvo que el PAN no puede quedarse atrás de los otros partidos y no tener una posición política, por lo que anunció que la próxima semana emitirá una declaración tras el análisis de los hechos entre él y los panistas relacionados con el tema.

El diputado Rafael Sánchez Pérez le dijo que tomara las cosas con calma, porque no se podía tomar una postura política sin conocer el contenido del dictamen que emitirá la sección instructora. Empero, según versión de senadores, Espino puntualizó que él será quien decida.

El dirigente llegó de manera sorpresiva a la Torre Azul, razón por la cual muchos senadores no estuvieron presentes, mientras otros, que tenían conocimiento del encuentro, prefirieron hacer el vacío. De esta manera la reunión se inició con 10 de 46 senadores panistas, y más tarde se sumaron siete.

Georgina Saldierna, Andrea Becerril, Roberto Garduño y Enrique Méndez