Amigos del titular de Semarnat desplazan a personal especializado en la dependencia

Ecologistas acusan a Cárdenas Jiménez de favorecer intereses empresariales

El aspecto ambiental ha quedado de lado; la secretaría, "un botín": Greenpeace y Cemda

ANGELICA ENCISO L.

Panistas, ex beisbolistas y amigos del titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Alberto Cárdenas Jiménez, precandidato panista a la Presidencia de la República, ocupan las delegaciones estatales de esta dependencia y de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa). Ese grupo desplazó ya a los especialistas en temas ecológicos que antes encabezaban esas áreas.

En plena campaña para obtener la candidatura del PAN, Cárdenas Jiménez se ha rehusado a dejar la dependencia y asegura contar con permiso del presidente Vicente Fox para su precampaña. En el año y medio que lleva al frente de la Semarnat destituyó a alrededor de 300 funcionarios y cambió a la mayoría de los delegados estatales.

No sólo llevó a la Semarnat a ex subordinados suyos en el gobierno de Jalisco, sino que en todo el país despidió a los delegados que estaban antes de septiembre de 2003, para colocar a integrantes del PAN que han sido legisladores federales o estatales, dirigentes estatales de ese partido y ex funcionarios de gobiernos panistas, pero sin experiencia en el tema ambiental.

Esto ha sido cuestionado por organizaciones ambientalistas, porque consideran que la llegada de Cárdenas Jiménez a la Semarnat significó un cambio radical en la dependencia, que de ser un área que se mantuvo al margen de partidismos, en la cual sus funcionarios era gente especializada en rubros ambientales, paso a ser una secretaría ocupada por integrantes de un partido político y amigos del funcionario, y esto la llevó a convertirse en un botín, señaló Alejandro Calvillo, director de Greenpeace México.

Al asumir el cargo de secretario de Medio Ambiente, Cárdenas Jiménez empezó por hacer cambios en áreas sustanciales. Designó al empresario jalisciense Juan José García de Alba como subsecretario de Fomento y Normatividad Ambiental, y éste impulsó cambios en las regulaciones ambientales que han ido en detrimento de los recursos naturales, como el caso de la norma 022 de manglares, señala Calvillo.

Sin embargo, este funcionario dejó el cargo a los pocos meses y reapareció en enero de este año convertido en uno de los promotores de la precandidatura del secretario, encabezando la Red de Apoyo Va por México.

En la Semarnat ocupan puestos clave funcionarios que siempre han sido allegados a Cárdenas Jiménez. Es el caso de José de Jesús Levy, quien fue secretario de Finanzas cuando el precandidato panista era gobernador de Jalisco; también el actual titular de la Unidad Coordinadora de Asuntos Internacionales, José Manuel Bulás Montoro, que antes fue su secretario particular, y Raúl Tornel, quien ocupa el cargo de coordinador de asesores y es un conocido empresario.

En las designaciones en las delegaciones Cárdenas Jiménez siguió la misma línea. En Jalisco puso a un amigo suyo, José de Jesús Alvarez, e incluso en una ocasión lo defendió durante una conferencia de prensa en Guadalajara, cuando los reporteros cuestionaron la designación, ya que argumentaron que se trataba de alguien sin conocimientos en medio ambiente: "Yo nunca tuve ningún curso de ambientalista", dijo el secretario.

A Quintana Roo envió, en marzo del año pasado, a Roberto Aguilera Hernández, quien actuó como procurador general de Justicia de Jalisco cuando Cárdenas Jiménez fue gobernador. Este delegado, en la toma de posesión de su cargo, se comprometió a "agilizar los trámites de expedientes rezagados" en una zona de alto interés ambiental y donde están en procesos legales desarrollos controversiales, como es el caso de Costa Cancún, el cual fue impugnado por el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda). Frente a estas designaciones, Gustavo Alanís, director del Cemda, manifestó que la Semarnat se ha encargado en los últimos meses de "preservar y vigilar en favor de los intereses empresariales, haciendo a un lado el aspecto ambiental".

Un caso similar se dio en Morelos, donde tras el nombramiento de Arturo Gómez Mancilla como delegado, la organización Guardianes de los Arboles señaló que el hecho era una "muestra de la panificación en las delegaciones federales rumbo a 2006, para abrir espacios y movilizar los recursos de la Federación a los estados". Estimaron que la llegada de ese funcionario tenía como propósito que a ese estado llegara una avalancha de inversiones.

En Veracruz, el representante de la Semarnat es el panista Manuel Molina Martínez, quien ocupa el cargo desde enero de este año. Antes fue responsable de la Profepa en la entidad, organismo que ahora dirige Francisco Luis Briseño Cortés, ex coordinador de la campaña del candidato del PAN al gobierno del estado, Gerardo Buganza.

Otra entidad importante por el número de industrias y recursos forestales es el estado de México, donde el responsable de la Semarnat es Ricardo Tejeda Nichols -sobrino de José Luis Durán, fallido aspirante a la candidatura blanquiazul para la gubernatura-, sin ninguna experiencia en la materia. Mientras el delegado de la Profepa, Alejandro Soto, fue candidato a la delegación Alvaro Obregón en 2003.

El responsable en Aguascalientes, Marco Acero Varela, según columnistas de la entidad, es cuñado de Carlos Medina Plascencia y fue subsecretario de Ecología en el gobierno estatal.

En las delegaciones de la Profepa se repite la misma situación. No sólo el procurador ambiental, José Luis Luege Tamargo, es un ingeniero químico sin formación ambiental, sino que en la mayoría de las entidades, salvo casos como los de Baja California Sur, Coahuila, Chiapas e Hidalgo, los responsables de la vigilancia ambiental son panistas e incluso hay un ex beisbolista: Ernesto Munro Palacio, que está a cargo de la delegación en Sonora.

El giro político que se dio a la Semarnat refleja "el nulo interés del presidente Vicente Fox por los temas ambientales, porque la dependencia no sólo se fue empanizando, sino que fue girando hacia el sector privado, se metió a gente que tenía que ver con cámaras industriales y ligada a la iniciativa privada", sin experiencia en el tema, agregó Alanís.