Tensión en la explanada de Venustiano Carranza, entre seguidores de Batres y Villa
Grupos perredistas pelean espacios para las campañas de sus candidatos
Ampliar la imagen Mart�atres y Gilberto Ens�iga, candidatos a presidente y secretario general del PRD en el Distrito Federal, respectivamente, durante un acto de campa�ayer en la explanada de la delegaci�ustavo A. Madero FOTO Mar�Luisa Severiano
Miembros de la Corriente de Izquierda Democrática (CID) y de Unidad y Renovación (Unyr), por un lado, y de Nueva Izquierda (CNI), por el otro, se enfrascaron ayer en una lucha por utilizar la explanada de la delegación Venustiano Carranza para apoyar a sus respectivos candidatos a la presidencia del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en el Distrito Federal, Martí Batres e Isaías Villa.
Eran las 13:30 horas. Minutos antes Batres Guadarrama había concluido su acto de proselitismo en la explanada de la delegación Gustavo A. Madero (GAM), cuando sus colaboradores le avisaron, por teléfono celular, que funcionarios de la Venustiano Carranza les habían impedido instalar el templete, argumentando que a las 16 horas la delegación tenía programado un "evento cultural" en contra del desafuero del jefe de Gobierno del DF, Andrés Manuel López Obrador. Los rumores y la desinformación comenzaron a correr entre uno y otro bandos. Incluso, los diputados Alfredo Hernández -local-, y Gilberto Ensástiga -federal, con licencia-, quien contiende junto con Martí Batres por la secretaría general, advertían que podría haber problemas.
Poco después de las 15 horas, el personal de comunicación de Batres avisaba que el acto se cambiaría de la explanada de la delegación al jardín de Los Periodistas, ubicado a unas cuadras de la sede delegacional, "porque Isaías Villa estaría con Raquel Sosa", y para evitar enfrentamientos habían decidido moverse.
Una horas después, en la explanada de la Venustiano Carranza no más de 30 personas veían el espectáculo organizado por la Secretaría de Cultura. Otro grupo, ubicado junto a las escaleras, confirmó a los reporteros que iban a un acto de Isaías Villa. Aunque después reviraron; "¿ustedes de dónde vienen?, ¿quiénes son? Nosotros no sabemos nada, pregúntenle a él". A una señora se le salió decir: "Nos hablaron y nos dijeron que viniéramos (es) gente del diputado Julio César Moreno -simpatizante de Nueva Izquierda". De inmediato, otra corrigió: "No, venimos al acto de Martí".
La directora general de Desarrollo Social de Venustiano Carranza, Estela Damián, explicó que la Secretaría de Cultura del gobierno capitalino solicitó desde el 16 de febrero el espacio para llevar a cabo una actividad denominada Rollo Ciudadano, el sábado 26 de febrero de las 12 a las 20 horas.
En el oficio se informa: "la Secretaría de Cultura, en respuesta al intento del desafuero del jefe de Gobierno del Distrito Federal, emprenderá una serie de acciones encaminadas a informar a los ciudadanos respecto del tema. Pretendemos iniciar en la explanada de la delegación Venustiano Carranza, si ustedes lo consideran pertinente".
Agregó que apenas el viernes, a las 14:21 horas, se recibió una carta informando de la realización del acto de campaña, programado para el 26 de febrero a las 16 horas en la explanada, de los candidatos Martí Batres y Gilberto Ensástiga. "Vía telefónica se le notificó a José Luis Santos -colaborador de Batres- que no podía ser, porque ya estaba programado un acto a esa misma hora, de la Secretaría de Cultura. La respuesta fue: pinches ojetes".
Puntualizó que, sin excepción, la delegación no podía permitir que un acto de partido se mezclara con uno organizado por el gobierno. "Se generaría una mala percepción entre los ciudadanos sobre un posible desvío de recursos a favor de las campañas".
Como simpatizante de Nueva Izquierda, Damián Peralta afirmó: "tenemos claro que tampoco nosotros podíamos montarnos en el evento".
Por la mañana en la GAM, minutos antes de que llegara Batres Guadarrama se registró un conato de violencia cuando simpatizantes del Frente Ciudadano, encabezados por el diputado local Francisco Chiguil, exigían que se bajaran del templete algunos dirigentes. Aunque el incidente no pasó de algunos jaloneos, el ambiente era tenso.