Se asocia a la firma con el proyecto de un centro comercial en Rego Park, en Queens
Sindicatos y pequeños comercios de NY tratan de evitar apertura de Wal-Mart
Representantes de la AFL-CIO la acusan de rebajar el nivel de vida de los trabajadores
Nueva York, 26 de febrero. Wal-Mart en Nueva York en 2008. Este proyecto, banal a primera vista, empieza a perfilarse como una batalla de largo aliento para la primera cadena mundial de distribución en el mundo, ya que se enfrenta a duros frentes de oposición que ya comenzaron a movilizarse.
Desde que se asoció su nombre al proyecto de un centro comercial en Rego Park, en el barrio de Queens, se han encendido las protestas que parten de los sindicatos locales y de los propietarios de los pequeños comercios.
El jueves, los primeros se complacieron en anunciar que la cadena había sido descartada por el promotor candidato a obtener el permiso para la construcción.
El grupo inmobiliario Vornado Realty Trust decidió "desplazar" a Wal-Mart de los 15 mil metros cuadrados de grandes superficies que prevé construir en los próximos tres años, indicó el New York City Central Labor Council (NYCCLC), federación que reúne a 400 sindicatos neoyorquinos afiliados a AFL-CIO.
No se ha brindado ninguna justificación oficial. El promotor se rehusó a comentar la noticia, al tiempo que Mia Masten, vocera de la cadena para la costa este, no pudo ser ubicada ni el jueves ni el viernes.
Según los sindicatos, que critican duramente los salarios bajos de Wal-Mart para lograr precios bajos, la poderosa movilización de los últimos dos meses logró hacer reflexionar a Vornado sobre los riesgos de una asociación.
"Cualquier promotor debería dudar en el momento de analizar la inclusión de Wal-Mart en sus futuros proyectos", advirtió un sindicato del sector que reivindica tener 100 mil miembros en Estados Unidos, el RWDSU (Minoristas, mayoristas y Unión de Tiendas).
La controversia planteada recuerda el revés que sufrió en abril pasado Wal-Mart en California, cuando luego de un referéndum los electores de Inglewood, en las afueras de Los Angeles, rechazaron con más de 60 por ciento de los votos el proyecto de un hipermercado de la cadena en su comuna.
Aunque es demasiado pronto en Nueva York para considerar un llamado a la movilización de la gente de ese tipo, el presidente de NYCCLC estimó que "el combate contra la instalación de Wal-Mart en Rego Park no es más que el comienzo de una larga batalla".
Su discurso resume la mayoría de las críticas que se manejan: el primer empleador en Estados Unidos después del gobierno federal "es decididamente anti sindicatos", practica "la intimidación para suprimir el derecho de los asalariados" y "rebaja vergonzosamente el nivel de vida de los trabajadores estadunidenses", indicó el representante de la representación sindical.
De estas acusaciones se defendió también esta semana el director general Lee Scott, incluso antes del anuncio del revés de Nueva York, pero con otro objetivo: intentar calmar los espíritus después del criticado cierre de una tienda en Quebec que quería formar un sindicato.
"Pienso que si ustedes miran la situación con espíritu amplio, deben concordar que Wal-Mart es positivo para Estados Unidos", argumentó Scott ante un foro de empresarios en Los Angeles.
En los programas de televisión Wal-Mart ha suscitado apasionados debates a lo largo y ancho de Estados Unidos. En ellos se enfrentan los críticos con quienes apoyan a Scott, afirmando que la cadena ofrece empleos no calificados y ayuda a reducir el desempleo.
"Wal-Mart no es un industrial, es un proveedor de servicios a los clientes, sus salarios son justos para el tipo de servicios ofrecido", respondió un "pro" a un "anti" el jueves en la cadena CNBC.
El grupo que emplea aproximadamente 1.2 millones de personas, prometió la creación de 100 mil nuevos puestos de trabajo en Estados Unidos en 2005, contra 83 mil en 2004.