El filósofo y el antropólogo, relevantes intelectuales de la diáspora española
Reconocen la fecunda trayectoria de Sánchez Vázquez y Santiago Genovés
El pensador agradeció ''ser homenajeados por una institución emblemática'' de ese exilio
Comparten su sincero amor por México y España, subrayó la embajadora Cristina Barrio
Ampliar la imagen El fil�o Adolfo S�hez V�uez durante el homenaje que recibi�a noche del jueves, en el Ateneo Espa�de M�co FOTO Jos�arlo Gonz�z
Modesto pero emotivo fue el homenaje que el Ateneo Español de México rindió la noche del jueves al filósofo Adolfo Sánchez Vázquez y al antropólogo Santiago Genovés, dos de los intelectuales más destacados del exilio republicano.
Además de reconocer la fecunda trayectoria de ambos, el homenaje fue para celebrar sendos galardones con los que recientemente fueron distinguidos: el Premio María Zambrano otorgado a Sánchez Vázquez por la junta de cultura de Andalucía, en reconocimiento a su tarea filosófica, y el galardón concedido por la Asociación Latinoamericana de Antropología Biológica a Genovés como el sociólogo más distinguido de la región.
Por razones de salud, no pudo asistir al acto Santiago Genovés, de cuya larga trayectoria se hizo un recuento. Fueron recordadas, sobre todo, sus célebres expediciones en barca a través del océano para probar sus hipótesis sobre el comportamiento humano: la Ra, efectuada entre 1969-1970, y la Acalli, en 1973. Las experiencias de esas expediciones fueron publicadas en dos libros.
Sánchez Vázquez dijo en breve entrevista con La Jornada, que resulta significativo el homenaje de una institución emblemática del exilio español, ''que nació justamente para defender los valores de la cultura española democrática que en España eran perseguidos y prohibidos. Eso tiene un valor extraordinario para nosotros".
También se refirió al Ateneo como una ''institución muy noble" que ha permitido y propiciado ''el contacto entre españoles y mexicanos".
Del destierro al transtierro
En la ceremonia también estuvo presente la embajadora de España en México, Cristina Barrio, quien destacó en los homenajeados un elemento común: ''Su sincero amor a dos países entre los que les ha tocado repartir sus afectos. Pero además comparten otro elemento: una profunda dedicación a su trabajo que les ha llevado por diferentes vías, a Santiago a través de la antropología, y a Adolfo a través de la filosofía, a sentir y a expresar un enorme respeto por el ser humano".
La presidenta de la mesa directiva del Ateneo, Leonor Sarmiento, dio lectura a fragmentos de un texto sobre el exilio escrito por Sánchez Vázquez en 1975, año de la muerte del dictador Francisco Franco. Dicha reflexión está contenida en el libro Del exilio en México. Recuerdos y reflexiones.
Al respecto, Sánchez Vázquez recordó: ''En el exilio distingo dos fases, una que es a la que se refiere propiamente este texto -escrito en 1975, cuando ya había condiciones para que los exiliados que así lo desearan volvieran a España-, la de los primeros años en que, no obstante la acogida tan generosa de México y el afecto que siempre hemos tenido de los gobiernos y del pueblo mexicanos, nos sentimos partidos en dos, habíamos perdido la tierra y no acabamos de integrarnos en ésta porque todavía teníamos la idea del regreso".
Pero el exilio se prolongó ''muchos años más de lo que podíamos prever y, entonces, ese desgarro se va de cierto modo limando en cuanto a que cada vez nos vamos integrando más en el país que nos acogió".
Con el tiempo ''hacemos amigos, crecen los hijos, tenemos relaciones profesionales y lo que en una primera fase se caracterizó como destierro, por la separación de la tierra de la que uno procede, se va a convertir en lo que José Gaos llamaba transtierro, es decir, en la integración en el país que hemos vivido".