Viola la laicidad del Estado y estigmatiza a quienes no pertenecen a un hogar: Andar
Impugna organización campaña foxista que busca instaurar el Día de la Familia
Ampliar la imagen La campa�ifunde la idea de una familia de una sola estructura, afirma Andar FOTO Archivo La Jornada
La Alianza Nacional por el Derecho a Decidir (Andar) se pronunció en contra de la campaña del gobierno federal para instituir el primer domingo de marzo como el Día de la Familia, porque es contradictoria con la realidad de los mexicanos, estigmatiza a quienes no pertenecen a un hogar nuclear y viola la laicidad del Estado.
De acuerdo con las estadísticas del censo de población de 2000, 71.5 por ciento de las familias tienen una estructura nuclear (mamá, papá e hijos), en tanto que el resto, casi una tercera parte, está conformada de una manera distinta: en 7.8 por ciento de los hogares sólo hay madre o padre con sus hijos; 24 por ciento vive de manera extensa, es decir, con más miembros de la familia, como pueden ser abuelos, tíos, cuñadas, entre otros.
La misma información resalta que 6.4 por ciento son hogares unipersonales y representan casi a 7 millones de personas; mientras que 7.6 de cada cien hogares está integrado por parejas heterosexuales sin hijos. Además, en el año del censo había 158 mil 175 hogares (0.7 por ciento del total) en los que el jefe del hogar y su pareja eran del mismo sexo.
Estos datos oficiales confirman que en el país existen muchos "arreglos domésticos" en donde no necesariamente conviven un padre, una madre e hijos solteros, resaltó Andar.
De ahí que la agrupación, en la que participan, entre otros, Olac Fuentes Molinar, Arnoldo Kraus y Nadine Gasman, resaltó que al hacer eco de una iniciativa fomentada desde el sector privado, el presidente Vicente Fox viola la laicidad del Estado, pues asumir que la familia puede ser de una sola estructura es una postura "claramente clerical, que no representa al total de la población, ni los valores democráticos. No insta a la tolerancia ni al respeto", apuntó.
Para la organización, creada en 2002 con la finalidad de fortalecer el ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos de las personas, el problema central de la iniciativa para celebrar el Día de la Familia es que se pretenda institucionalizar la ideología del grupo promotor sin tomar en cuenta la realidad mexicana.
Destacó que "las expresiones que adoptan las familias en cuanto a su estructura y composición varían a lo largo de su ciclo de vida y, con frecuencia, son la muestra más palpable de las relaciones de apoyo y solidaridad que se dan entre personas ligadas por distintos grados de parentesco o alianza".
Esta solidaridad, agregó, ha permitido a los mexicanos afrontar los rezagos en materia política, económica y social. Así que enviar el mensaje de que quien no pertenezca a un hogar nuclear tampoco es parte de una familia, o por lo menos no de una "normal" o "ideal", equivale a estigmatizar a esa persona.
La organización civil, en voz de Carlos Echarri, coordinador académico del doctorado en Estudios de Población de El Colegio de México, se refirió, en particular, a los niños. La posibilidad de que no se reconozcan en el modelo que se transmite en los anuncios de la campaña podría ocasionarles un daño en el desarrollo de su personalidad, apuntó.
Enseguida, Andar propuso que si las grandes empresas que ahora patrocinan la iniciativa del Día de la Familia quieren apoyar a esa estructura de la sociedad, en vez de proponer un modelo único y excluyente, debería comenzar por informar a la población y a sus accionistas de las estrategias que realizan en favor de las familias, como la instalación de guarderías o los permisos por paternidad, por ejemplo.
Al presidente Fox, la agrupación le recordó que México es un Estado laico. "El gobierno debe mostrar congruencia con sus discursos en contra de la discriminación, a favor de la tolerancia, la inclusión y el respeto a la diversidad", concluyó.