Polleros extorsionan a familiares de migrantes
Familiares de indocumentados denunciaron que han recibido llamadas telefónicas en las que les piden dinero a cambio de soltar a sus parientes que por algún motivo fueron retenidos por la autoridad, ya sea en el cruce fronterizo con Estados Unidos o en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México. Las cantidades van de los 800 a 2 mil dólares. Los extorsionadores tienen identificada a la familia, porque preguntan por hermanos o primos por nombre y apellidos, e incluso conocen los sobrenombres con. En algunos casos se han hecho pasar por el mismo familiar, que regresa "del otro lado".
La familia Vázquez, que vive en la colonia Malinche de la delegación Gustavo A. Madero, informó que el pasado fin de semana les llamó un primo para pedirles ayuda porque estaba en el aeropuerto y los agentes de la aduana lo detuvieron porque se excedía de equipaje. Para dejarlo ir, pues traía 20 mil dólares, ropa y zapatos deportivos, le pidieron 2 mil pesos en tarjetas telefónicas, o de lo contrario su equipaje quedaría decomisado y élsería detenido por no reportar la cantidad que portaba.
Mientras la familia Vázquez buscaba la forma de obtener las tarjetas, un vecino les recomendó llamar a su familiar a Estado Unidos y descubrieron que la detención era falsa e intentaban extorsionarlos. El consejo que dio un integrante de la familia Negrete, fue porque ellos vivieron una situación similar cuando uno de sus hijos cruzó de manera ilegal la frontera.
A "parientes que estaban en Atlanta les llamaron para pedirles 2 mil dólares porque la migra había agarrado a mi hermano. Nos pidieron que depositáramos el dinero en Western Union. Después nos enteremos que ni siquiera tuvo problemas para cruzar, porque pasó a la primera".
Las familias señalaron que quienes intentan hacer la extorsión tienen vínculos con polleros o gente dedicada a hacer los contactos para cruzar la frontera, y saben los teléfonos y nombres de las familias. Además también están enterados cuando salen los grupos, porque es justo cuando llaman, "aprovechando la angustia de la familia, porque uno no sabe nada hasta que llega al otro lado el pariente que se va", comentó uno de los integrantes de la familia Negrete.
Josefina Quintero