Los diputados delegan al IFE la organización de los comicios, con sólo $200 millones
Aprueban reformas para garantizar el voto de mexicanos en el extranjero
Aún no determinan dónde instalarán los centros de votación
El dictamen, al Senado
Sin recursos económicos suficientes y sin un programa operativo que prevea una exitosa aplicación, la Cámara de Diputados aprobó ayer, con 391 votos en favor, cinco en contra y 22 abstenciones, el dictamen que reforma diversos artículos del Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe) para garantizar a los mexicanos que se encuentren fuera del territorio nacional la posibilidad de ejercer su voto para Presidente de la República.
Con esta decisión, los diputados dejaron al Instituto Federal Electoral (IFE) todo el peso y la responsabilidad de organizar los comicios en el extranjero, sin determinar los sitios o ciudades donde podrá emitirse el voto, y con un presupuesto de 200 millones de pesos, cuando el cálculo del propio IFE es de 6 mil millones de pesos para poder instrumentar el proceso durante 2006.
Ante la oposición de pocos diputados, entre ellos los del Partido del Trabajo, se impuso la decisión de priístas, panistas y perredistas, quienes valoraron desde sus diversidades ideológicas las ventajas que podrían obtener en los comicios de 2006.
Los petistas advirtieron que el proceso será inacabado, porque no existe planeación previa, y tal desorganización sólo favorecerá al gobierno de Vicente Fox y a su partido (Acción Nacional), porque se ha encargado de utilizar todos los recursos a su alcance para mediatizar a los posibles electores.
El dictamen elaborado en las comisiones de Gobernación y de Población, Fronteras y Asuntos Migratorios fue turnado ayer a la Cámara de Senadores, donde continuará su trámite, e incluye una simple descripción de los procedimientos para instrumentar el voto de los mexicanos en el exterior, cuyo inicio será a partir de una fecha por definir, de acuerdo con la disponibilidad de presupuesto.
En el documento se delega toda la responsabilidad de la organización de los comicios en el exterior al IFE, que deberá colaborar con las autoridades mexicanas competentes para iniciar, en primera instancia, las negociaciones con sus pares extranjeros responsables de establecer acuerdos, con la finalidad de organizar la jornada electoral en otras naciones.
En el caso de la ubicación de los centros de votación, el Consejo General del IFE deberá seleccionar las ciudades en donde éstos habrán de concentrarse. El criterio para ubicar las casillas será que en la comunidad seleccionada vivan un mínimo de 750 ciudadanos de origen mexicano.
Las personas que figuran en el padrón se integrarán en un catálogo general de electores en el extranjero, y el requisito para incluirlos será que presenten la credencial para votar con fotografía y den a conocer previamente su decisión de participar en la jornada electoral.
Acerca de la propaganda electoral, los partidos políticos tendrán prohibido contratar espacios en televisión y radio de propiedad extranjera; únicamente lo podrán hacer en medios de comunicación nacionales.
Por lo que toca a los módulos de registro de electores, éstos funcionarán de junio del presente año hasta el 15 de enero de 2006 con el propósito de actualizar el padrón existente fuera de México. También se realizará una campaña de fotocredencialización en el extranjero con la finalidad de incorporar al catálogo general y al padrón electoral el mayor número de ciudadanos mexicanos.
En cada distrito electoral uninominal el voto se emitirá en la sección electoral que comprenda el domicilio del ciudadano, excepto en aquellas circunstancias en que éste se encuentre en tránsito.