Bajo explotación, 180 millones de menores
AFP
Londres, 21 de febrero. Uno de cada 12 niños o jóvenes menores de 18 años trabaja en el mundo bajo las peores formas de explotación, ya sea en fábricas, minas, en el campo, en ejércitos o en prostitución, reveló un dramático informe del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) publicado hoy aquí.
El 97 por ciento de los niños y jóvenes sometidos a esa explotación se halla en los países pobres o en las naciones en desarrollo, señaló el estudio del organismo, el cual advierte que el trabajo infantil es "una herida en la conciencia mundial del siglo XXI".
Según el informe, elaborado por la sección británica de Unicef, "180 millones de niños y jóvenes menores de 18 años son sometidos a las peores formas de trabajo infantil: labores peligrosas, esclavitud, trabajos forzados, reclutamiento forzado en ejércitos, prostitución y otras actividades ilegales".
Las estadísticas que enumera la investigación son espeluznantes: 352 millones de niños de entre 5 y 17 años están comprometidos en algún tipo de trabajo, de los cuales 221 millones realizan labores domésticas o agrícolas.
Sólo en Africa la mitad de los niños de entre 5 y 14 años trabajan, indica el fondo, el cual destaca el impacto directo de la pobreza en el desarrollo infantil.
En América Latina 17 por ciento de la población infantil está en esas condiciones. Subraya que los "niños entran al mundo laboral y la explotación empujados por la pobreza y la falta de educación", situación que es agravada por los efectos del virus del sida.
El Unicef evoca la situación de millares de niños y jóvenes que trabajan en minas en Latinoamérica, o son niños soldados, reclutados en cruentos conflictos en Africa, donde las niñas son sometidas a explotación sexual, o de obreros en peligrosas fábricas químicas en Asia.
Pero también en Estados Unidos hay entre 300 mil y 800 mil niños que trabajan en granjas, en su mayoría provenientes de familias hispanas inmigrantes.
"Para poner fin a esa explotación de los niños en el mundo es necesario acabar con la pobreza", afirmó David Bull, director ejecutivo de la sección británica, al presentar el reporte.
Subrayó el inmenso trabajo que falta por hacer "para proteger los derechos de los niños en todo el mundo" y llamó a incrementar la ayuda internacional contra el abuso y explotación de niños.
"Mil millones de niños en el mundo viven aún en la pobreza, y eso es una injusticia inaceptable", afirmó. También instó a los países ricos a que cumplan con sus compromisos para ayudar a las naciones pobres.
"Hace más de 30 años los países ricos se comprometieron a dar 0.7 por ciento del producto interno bruto (PIB) en ayuda internacional, pero hasta ahora sólo cinco países -Dinamarca, Noruega, Holanda, Luxemburgo, Suecia- cumplen con esa oferta", concluyó el Unicef.