Advierte que Kabul y la comunidad internacional deben actuar ya, para evitar retroceso
Peligran los avances económicos en Afganistán por la desigualdad: PNUD
La seguridad del pueblo afgano "no debe quedar en segundo plano", señala
Kabul, 21 de febrero. Aunque ha habido avances en Afganistán después de la caída del régimen talibán, existe el riesgo de retroceso por la pobreza, la desigualdad y la inestabilidad, contra lo que la comunidad internacional debería comprometerse, advirtió hoy el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Las necesidades básicas de los afganos, como trabajo, ingresos, asistencia sanitaria, educación y vida digna, deben ser satisfechas y la ayuda internacional fuertemente controlada, afirma el PNUD en su primer Informe sobre el Desarrollo Humano en Afganistán, presentado hoy en esta capital.
En caso contrario Afganistán podría convertirse en un Estado inseguro, que amenace a sus habitantes y a la comunidad internacional, agrega.
El informe destaca los avances en la reconstrucción de la economía y la enseñanza; sin embargo, los resultados están en riesgo por la pobreza, la desigualdad y la inestabilidad.
El gobierno en Kabul y la comunidad internacional deben actuar ahora, pero también están obligados a rendir cuentas al pueblo afgano.
"La comunidad internacional se ve comprometida en la lucha contra el terrorismo y las drogas en Afganistán, pero la seguridad de los afganos no debe quedar en segundo plano respecto de los intereses de seguridad nacional e internacional de otros países", señala el informe del PNUD.
El régimen talibán fue depuesto en diciembre de 2001, al amparo de una ofensiva aérea lanzada por Estados Unidos en represalia por el apoyo brindado por los talibanes a Osama Bin Laden y su red Al Qaeda, responsable de los atentados contra las Torres Gemelas, en Nueva York, y el Pentágono, Washington, el 11 de septiembre de ese año.
Hamid Karzai, nombrado por Estados Unidos presidente interino tras la caída de los talibanes, fue electo mandatario en las elecciones de octubre pasado y su gobierno, que cuenta con el apoyo de una fuerza internacional de paz, sólo tiene el control de algunas partes de Kabul.
Según reportes de Naciones Unidas, tras la caída del régimen talibán se han incrementado la producción y tráfico de heroína en el país.