Usted está aquí: viernes 18 de febrero de 2005 Economía El Senado analiza llamar a comparecer a Gil Díaz sobre la deuda en Pidiregas

Alcanza ya 65 mil 590 millones de pesos; de 1999 a la fecha aumentó 44 veces

El Senado analiza llamar a comparecer a Gil Díaz sobre la deuda en Pidiregas

En pocos años estaremos obligados a rematar el país, advierte el senador Cantón Zetina

ANDREA BECERRIL

El Senado de la República analiza llamar a comparecer al secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, a fin de que informe de manera detallada la deuda del sector energético contraída con trasnacionales a través del esquema de los Proyectos de inversión con impacto diferido en el registro del gasto (Pidiregas), misma que alcanza los 65 mil 590 millones de pesos, ya que desde 1999 a la fecha el monto se incrementó en 44 veces.

A nombre de su grupo parlamentario, el senador del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Oscar Cantón Zetina, pidió que se llame a reunión al funcionario, toda vez que ese endeudamiento a través de los Pidiregas, que no es otra cosa sino dejar a inversionistas privados extranjeros las obras de infraestructura de Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE), se ha acentuado sobre todo en este sexenio y hay riesgo de crisis económica.

El legislador explicó que en 1995 se reformaron la Ley General de Deuda Pública y la Ley de Presupuesto, Contabilidad y Gasto Público Federal, para dar paso a los Pidiregas. En 1996 el porcentaje inicial de inversión a través de ese esquema en el sector energético fue de 4 por ciento.

En 1997, con la incorporación de Pemex esa inversión financiada aumentó en 15 por ciento y en 2000 era ya de 56 por ciento, tendencia que se acentuó más en el sexenio del presidente Fox, toda vez que en 2004 la inversión en el sector energético a través de los Pidiregas alcanzó 71 por ciento y sólo el 28 por ciento fue con fondos presupuestales.

Ello significa, precisó el senador Cantón, que el gobierno federal redujo las inversiones con recursos propios en Pemex y CFE, para que sea el sector privado, a través de empresas trasnacionales, el que tenga a su cargo la mayor parte de las obras de infraestructura.

No es posible seguir permitiendo que el capital foráneo financie casi a 100 por ciento al sector energético, ya que cada día que pasa la deuda sigue creciendo y ''en pocos años nos veremos obligados a rematar al país, al aceptar todas las condiciones que impongan nuestros acreedores''.

Hizo notar que incluso se desconoce el monto total del adeudo bajo el esquema de Pidiregas en sus 10 años de existencia, toda vez que sólo se registran contablemente, conforme a los criterios de la Secretaría de Hacienda, solamente los pasivos, cuyo vencimiento corresponde al presente y al siguiente año.

El problema es grave, insistió, porque esa deuda provoca una demanda constante de recursos presupuestales para cubrir las amortizaciones e intereses generados año con año hasta el vencimiento de los contratos. De 1999 al 2005 el incremento significó pasar de mil 459 millones de pesos a más de 65 mil millones, es decir, aumentó 44 veces.

Es un asunto, recalcó, que compete al Congreso y de ahí la necesidad de llamar a comparecer a Gil Díaz, para que se transparenten los llamados Pidiregas, que son parte de la privatización encubierta de Pemex y la CFE. La propuesta se turnó a comisiones, donde deberá resolverse en los próximos días.

 
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