EU advierte que sancionará a los asesinos de Hariri
El ejército libanés, en alerta de máximo nivel
Siria condena el "terrible acto criminal" en Líbano
Ampliar la imagen Auxilio a un sobreviviente del atentado con bomba en Beirut FOTO Afp
Beirut, 14 de febrero. El ejército libanés anunció hoy que se movilizó y tomó medidas en varias regiones para "salvaguardar la estabilidad" después del asesinato aquí del ex primer ministro Rafiq Hariri, mientras Estados Unidos advirtió que considera sanciones para los culpables y exigió que el pueblo libanés pueda vivir "libre de la ocupación siria".
El asesinato del líder opositor se inscribe en un contexto de gran tensión política en Líbano y Siria, sometidos a fuertes presiones estadunidenses. Líbano se prepara para las próximas elecciones legislativas mientras Estados Unidos tiene a Siria en su lista de países que respaldan al terrorismo.
El ejército libanés decretó "la movilización general de todas las unidades, elevó el estado de alerta al máximo nivel, llamó a los militares que se encontraban de permiso y anuló todas las vacaciones", según un comunicado castrense. Asimismo, "tomó medidas preventivas en diversas regiones para salvaguardar la estabilidad".
A su vez, el canciller libanés, Mahmud Hamud transmitió a los embajadores de los países miembros del Consejo de Seguridad de la ONU la importancia que concede a la "estabilidad", y que si hay una reunión de la máxima instancia del organismo mundial, "recalcará su apego a la soberanía, la independencia y la unidad" del país. "Cualquier ataque a estos principios tendrá repercusiones negativas" en la estabilidad regional", dijo, y añadió que espera una respuesta de del Consejo de seguridad en las próximas horas.
El ministro aseguró que su país considera que "el atentado criminal" en el que murió Hariri está destinado a "desestabilizar a Líbano".
Siria condenó "el terrible acto criminal. El gobierno y el pueblo sirios están junto al hermano Líbano en esta peligrosa situación y dirigen a la familia de Hariri, así como a las familias de las (demás) víctimas su más sincero pésame", declaró el presidente Bachar Assad.
Rafiq Hariri, de 60 años, que encabezó cinco gobiernos en Líbano entre 1992 y 2004, murió en un atentado en Beirut perpetrado con coche bomba que según fuentes médicas causó al menos otros nueve muertos y un centenar de heridos. El primer ministro libanés Omar Karamé se desplazó hasta el lugar de la explosión.
Estados Unidos anunció que "examinará" con el Consejo de Seguridad y "otros gobiernos" de la región "las medidas que pueden tomarse para castigar a los responsables de este ataque terrorista.
"Este asesinato es un terrible recordatorio de que el pueblo libanés debe ser capaz de cumplir sus aspiraciones (...) libre de la ocupación siria", declaró el vocero de la Casa Blanca Scott McClellan.
A su vez, el portavoz de la secretaría general de la ONU dijo que "semejantes actos constituyen la vuelta a un capítulo de la historia del Líbano que parecía resuelto".
El atentado provocó una condenas de Rusia y países de la Unión Europea -Francia pidió una "investigación internacional"- así como de países latinoamericanos.
En la región, Irán condenó "vigorosamente el acto terrorista" que costó la vida a Hariri, dijo el vocero de la cancillería Hamid Reza Assefi, quien además manifestó la sospecha de que Israel pueda estar detrás del atentado. En cambio, el jefe de la diplomacia israelí, Sylvan Shalom, apuntó hacia Siria como posible responsable.
La Autoridad Nacional Palestina, Egipto, Jordania, la Liga Arabe, el gobierno interino de Irak, también condenaron el asesinato de Hariri, quien hizo fortuna en Arabia Saudita antes de orientarse en la política, y que era una personalidad reconocida en los ambitos financieros internacionales.
Un grupo que afirma llamarse "La victoria y la Jihad en la gran Siria" reivindicó sin aportar pruebas el atentado, en un comunicado difundido en la cadena Al Jazeera. Horas después, la policía libanesa anunció que registró en Beirut el domicilio de un palestino adepto a la corriente wahabista (extremismo del Islam), al que identificó como el hombre que aparece en el video de Al Jazeera.