Reportan aumento de venta de droga en Benito Juárez y Coyoacán
Delegados demandan apoyo a PFP y PGR
Los jefes delegacionales de Benito Juárez, Fadlala Akabani, y Coyoacán, Miguel Bortolini, solicitaron ayer la intervención urgente de la Policía Federal Preventiva (PFP) en sus respectivas demarcaciones, ante el crecimiento acelerado del narcomenudeo, que afecta fundamentalmente a niños y jóvenes.
Entrevistados por separado, luego de comparecer ante la Comisión de Administración Pública Local de la Asamblea Legislativa, remarcaron que verbalmente y por escrito han pedido que la PFP o la Procuraduría General de la República realice n operativos en las colonias donde prolifera la venta de enervantes
Inclusive, Akabani reconoció que Benito Juárez es la delegación con el mayor consumo de cocaína, mientras Bortolini expresó que cada vez son más los niños que son utilizados como burreros para la distribución de estupefacientes.
El titular de Benito Juárez remarcó que la venta de cocaína se da, sobre todo, afuera de las escuelas secundarias y preparatorias privadas, en especial las que colindan con las delegaciones Iztacalco y Tlalpan.
A su vez, el jefe delegacional de Coyoacán mencionó que en su jurisdicción el problema son las tienditas, donde se venden drogas directamente a los jóvenes, por lo que insistirá en que la PFP o la PGR tomen cartas en el asunto antes de que la capacidad de respuesta de las autoridades contra el narcotráfico sea infructuosa.
En otra parte, el director regional de la Policía Sectorial, Gerardo Antuñano, informó que los principales delitos que involucran a estudiantes de Gustavo A. Madero son: posesión, venta y distribución de drogas; robo de vehículo y asalto a transeúnte.
Al término de una reunión con directores de escuelas privadas de la demarcación, indicó que en ésta y en Azcaptozalco se han identificado 300 puntos de venta y distribución de drogas, lo cual se reportó a la PGR sin que hasta la fecha se conozca de algún resultado o acción de la dependencia para combatirlos.
Reconoció que el problema en las escuelas privadas no es sólo el consumo de drogas, sino la venta, porque muchos jóvenes se dedican a ello y no hay denuncia.
Ante las demandas de los directivos de las instituciones educativas que exigían mayor seguridad en sus planteles, Antuñano se comprometió a reforzar la vigilancia.
Sin embargo, solicitó la colaboración de los directivos porque en los planteles es donde se da la venta y distribución; además recomendó tener mayor cercanía con los encargados de la seguridad de las escuelas, pues en muchas ocasiones están involucrados en la comisión de los ilícitos.