El vocero dice que atrajo funciones de seguridad del Estado Mayor Presidencial

Justifican en Los Pinos la defensa de Cristina Fox contra Bejarano

ROSA ELVIRA VARGAS

El vocero presidencial, Rubén Aguilar Valenzuela, defendió que su oficina hubiera salido a aclarar el sábado pasado que Cristina Fox no conoce a Carlos Ahumada, como señaló René Bejarano. Para ello atrajo a su ámbito de competencia funciones de seguridad que realiza el Estado Mayor Presidencial respecto al Ejecutivo y a su familia.

Calificó de delincuente al ex asam- bleísta del PRD y respaldó la afirmación oficial de que hay corrupción en el Gobierno del Distrito Federal (GDF) por los casos de "(Carlos) Imaz en Tlalpan y el de la Gustavo A. Madero", en los cuales está probado, dijo, que hubo irregularidad o delito.

Se dijo extrañado de que algunos medios de comunicación "den voz a un presunto delincuente" que acusa "sin fundamento" a una hija del Presidente de la República.

Del mismo modo, aseguró que antes del nombramiento de Luis Ramírez Corzo como director de Pemex se tuvo listo el dictamen que lo exoneraba de toda acusación, que hizo la propia Secretaría de la Función Pública, el cual revelaba que todas esas imputaciones (contra el nuevo titular de la paraestatal) no tenían ningún fundamento.

El vocero también reconoció que aún no está totalmente concertada la reunión bilateral entre el presidente Vicente Fox y el mandatario estadunidense George W. Bush en Santiago de Chile.

En torno a la respuesta que dio Los Pinos a los señalamientos de Bejarano acerca de que Ana Cristina Fox y otros personajes visitaron a Carlos Ahumada en sus oficinas del Grupo Quart, Aguilar Valenzuela puntualizó, "de manera tajante", que la hija del mandatario no conoce al empresario y mucho menos se reunió con él.

Antes, el vocero de Los Pinos había buscado no hacer mayor declaración sobre el tema, al atribuir la información "a un delincuente que está en la cárcel por cometer un delito, o que lo hace acusando sin prueba alguna, salvo del testimonio de un supuesto testigo que la habría visto".

Luego corrigió y llamó a Bejarano "presunto delincuente", pero en lo que no rectificó fue sobre la imputación directa de que en el GDF existe una "cadena de corrupción", según dijo el sábado pasado la Presidencia.

Insistió: "en unos, por cosas probadas y juzgadas, y en otras por supuestas irregularidades que los hacen considerar como corrupción, en razón de eso se hizo la declaración".

Se le interrogó también sobre las atribuciones de la oficina de comunicación social a su cargo para declarar en nombre de un familiar del Presidente que es mayor de edad y tiene personalidad jurídica propia, como es el caso de Ana Cristina Fox. Respondió que con base en esa relación de parentesco, y en el ámbito del reglamento del Estado Mayor Presidencial de que la familia nuclear del Ejecutivo tiene una serie de posibles problemas o necesidades que esa institución militar cubre, "pensamos que es del mismo carácter, que un infundio de esa naturaleza, de un presunto delincuente, merece una respuesta contundente como la que se dio el sábado".

Por lo que toca al controvertido nombramiento de Luis Ramírez Corzo en la dirección de Pemex, insistió en los señalamientos de la propia empresa de que las acusaciones provienen de "sectores empresariales que tuvieron tratos privilegiados o especiales de la paraestatal" y que, por tanto, se sienten afectados en sus intereses. Sin embargo, defendió la facultad presidencial para hacer la designación y puntualizó que el nombramiento jamás se hubiera hecho si no hubieran investigado tales acusaciones "a fondo", exhaustivamente, como lo hizo la SFP.

Por último, Aguilar Valenzuela dijo que no hay motivo para suponer que no se realizará la reunión Fox-Bush en Chile, pero reconocio todavía quedan pendientes "cuestiones de detalle, de hora, de ajuste de agendas y cosas de esas", y que hasta que se tenga como contundente se dará por confirmada.