.
Primera y Contraportada
Editorial
Opinión
El Correo Ilustrado
Política
Economía
Mundo
Estados
Capital
Sociedad y Justicia
Cultura
Espectáculos
Deportes
Fotografía
Cartones
CineGuía
Suplementos
Perfiles
La Jornada en tu PALM
La Jornada sin Fronteras
La Jornada de Oriente
La Jornada Morelos
La Jornada Michoacán
Librería
Correo electrónico
Búsquedas
Suscripciones
Obituario

E S P E C T A C U L O S
..

México D.F. Viernes 12 de noviembre de 2004

TIEMPO DE BLUES

Raúl de la Rosa

Pasaba por aquí... los últimos pensamientos de Caíto

UNA RAYA MAS a ese maldito e implacable tigre que llaman cáncer. A veces creo que sólo sigue el rastro de los más buenos, de los necesarios en este mundo y sobre ellos se ceba.

NO SE PUEDE convocar el recuerdo de un amigo como Carlos Díaz Caíto, sin sonreír, tengo frescas las pláticas salpicadas de ironía, su pasión por Ray Charles (entre otras mil), y me digo: "Caíto no está muerto... tan sólo no está vivo".

ENTRESACADOS DEL LIBRO-DISCO de próxima aparición, bajo el sello de Ediciones Pentagrama y con prólogo de Germán Dehesa, tomamos retazos de la crónica que Caíto terminó pocos días antes de ser ingresado al hospital.

Corazón compartido

UNO NACE EN cualquier lugar del planeta, la realidad es que nuestros padres jamás nos consultan al respecto. Por estos días de 2004, mientras escribo estas páginas con anécdotas, transitando una saludable terapia de recuerdos, pienso en mi país de origen, Argentina, en mi niñez, el barrio, en las primeras andanzas en Mar del Plata.

Compañera

ALLI VIVI GRAN parte de mi infancia y adolescencia; también desarrollé mi pasión por la música y el radio, afortunadamente no existía la televisión, ese mundo imbécil, abrumador, esa novela canallesca escrita por un loco (dijera Zitarrosa).

PERO REGRESEMOS A esos días marplatenses en los que yo era un niño de ocho años y ella llegó a mi vida. Me la presentó el tío Juan Carlos que la traía en la mano.

TENIA EL CUERPO pequeño y armonioso, una cintura breve, un cuello alargado que se prolongaba en unos hombros redondos y suaves, y esa sonrisa sonora que me cautivó.

HOY, CINCUENTA AÑOS después de aquel encuentro, seguimos juntos luego de recorrer tanto mundo, tantas emociones, a veces teñidas de tristeza, otras de esperanzadora alegría, pero siempre con una generosa y frontal actitud ante la vida.

NUESTROS CUERPOS SON la prolongación de cada uno, nos habitamos mutuamente y seguiremos así hasta el final, en que seremos ''un solo difunto para no morir de dolor''.

MI GUITARRA AMADA, mi compañera eterna, mi destino cierto y el más cumplido.

Los emigrantes

EL CRISTOFORO COLOMBO luce imponente en el puerto de Santa María de los Buenos Aires en esta tarde primaveral...

AQUI ESTAN PARA despedirme en mi viaje a España: Mamá María, mi hermana Elena y Nydia Chichita Alarcón, madre de nuestra hija María Ximena que cumplirá cuatro años. También están aquí amigos y parientes de mi compañera de viaje, la cantante Marina Farías Gómez.

ES COSTUMBRE QUE los acompañantes de los viajeros puedan visitar y recorrer el barco dos horas antes de su partida. De pronto, Mamá María exclama: ''Hijo, yo conozco este barco.'' Lo expresa con tanta seguridad que me sorprende. ''Es imposible, mamá, es relativamente nuevo y...'' Me interrumpe: ''No es nuevo: es más viejo que tú y yo''. Nos dirigimos hacía la proa y allí está la placa: "Botado en Génova en 1924". Mi madre me besa y dice: ''Te vas a mi país en el mismo barco en el que yo me vine al tuyo, se cerró el circulo, hijo''.

El viaje

SALVANDO LAS DISTANCIAS, se repetía aquella escena de una película de Carlos Gardel cantando una jota aragonesa en la bodega de un barco repleto de emigrantes españoles, que llegaban a Buenos Aires. Sólo que nosotros íbamos en sentido contrario, hacía Barcelona. Llegamos el 18 de octubre de 1976.

Zitarrosa

EN LOS DISTINTOS festivales que se realizaban en todo el país y a los que frecuentemente acudíamos, tuve la oportunidad de ver a Alfredo Zitarrosa, un cantor popular auténtico.

QUISO EL DESTINO, y mi buena suerte, que coincidiéramos tiempo después en una reunión de amigos en casa de la cantante Soledad Bravo, en Caracas, Venezuela.

NOS VOLVERIAMOS A encontrar unos años después en Madrid.

Viaje a México

DIONILDO VELASQUEZ FUE quién me invito a participar como guitarrista de Alfredo Zitarrosa. Ese encuentro marcaría definitivamente el rumbo de mi vida.

...Y FUE ASI que llegamos Zitarroza, Carlos Bouza, Dioni, El Indio, Julio Amaya y yo el 6 de julio de 1977. Al pisar tierra mexicana sentí algo inexplicable. No sé qué fue: el olor, la calidez, una mezcla de confianza, curiosidad e ilusión.

Sanampay

YO CONOCIA DESDE Argentina a Naldo Labrín y a Delfor Sombra: México nos volvió a unir. Sanampay me brindó la experiencia de compartir un trabajo de grupo, juntos dejamos una memoria musical plasmada en tres discos. Este grupo tuvo como integrantes femeninas a Hebe Rosell, Guadalupe Pineda y Eugenia León.

Regreso a María Ximena

LUEGO DE 6 años de ausencia y vergüenzas archivadas, regresé a Buenos Aires a reencontrarme con el ser mas importante en mi vida: Maria Ximena, mi hija amada.

Los compadres

EN MEXICO, TODOS lo sabemos, no se puede pasar por la vida sin tener compadres. Graciela Serrano y Marcos Huerta, "dos horcones mexicanos de una amistad sin revés", me enseñaron con su generosidad que uno debe estar en la vida para dar, y no para pedir.

Y el amor

CADA MUJER QUE llegó a mi vida me enseñó algo importante, algo vital. Para las mujeres que he tenido la fortuna de conocer en mi vida, vaya el recuerdo más amoroso y mi gratitud como hombre. Ya está... ''amor, sencillo amor, el que mas cuesta".

La Catrina

EL ESTADO DE Oaxaca es el lugar mas bello y mágico que haya conocido en mi vida... Mientras estaba guardando la guitarra, escuché una voz a mis espaldas que preguntaba: -Oiga, m'hijito Ƒusted representa lo que es, o es lo que representa? -Señora, yo soy lo que represento, lo que le gustó y lo que le desagradó de mí: eso soy.

-VAYA CON DIOS, m'hijito-. Era la muerte sin duda.

Los dones

...PUDE COMPROBAR AL revivir estos recuerdos que, efectivamente, soy un hombre al que se le otorgaron diversos dones: el de la música...el de la amistad.

LA ELECCION, QUE no era otra que sobrevivir dignamente haciendo lo que me gusta: tocar la guitarra y cantar (un privilegio del que me hago responsable) . No existe nada mas gratificante que cumplirse los sueños infantiles y estoy seguro que el niño Carlitos Díaz que vive en mí, está feliz y me acompañará hasta el final con una sonrisa de cómplice agradecido."

[email protected]

Números Anteriores (Disponibles desde el 29 de marzo de 1996)
Día Mes Año
La Jornada
en tu palm

Av. Cuauhtémoc 1236 Col. Santa Cruz Atoyac
delegación Benito Juárez México D.F. C.P. 03310
Teléfonos (55) 91 83 03 00 y 91 83 04 00
Coordinación de Publicidad
Tels: (55) 91 83 03 00 y 91 83 04 00
Exts: 4329, 4308, 4137 y 4104

Email
Coordinación de Sistemas
Teléfonos (55) 91 83 03 11 y 91 83 03 77

Email

  © Derechos Reservados 2003 DEMOS, Desarrollo de Medios, S.A. de C.V.
Todos los Derechos Reservados. Derechos de Autor 04-2003-08131804000-203.
Prohibida la reproducción total o parcial del contenido sin autorización expresa del titular.
El título y contenido se encuentran protegidos por la legislación de la materia en la República Mexicana.