México D.F. Viernes 5 de noviembre de 2004
Sus egresados, con un nivel de aprovechamiento inferior a
los de otros sistemas
Desalentadores, los resultados de las telesecundarias:
expertos de la SEP
Instalaciones precarias y situación socioeconómica
desventajosa influyen en el bajo rendimiento, destacan en estudio Tres
de cada 10 alumnos en educación media, adscritos a esa modalidad
CLAUDIA HERRERA BELTRAN
Las
evidencias en torno a la eficacia de las escuelas telesecundarias, creadas
hace 36 años, son "desalentadoras", porque la mayoría de
los egresados de este modelo obtiene peores resultados que los alumnos
de secundarias generales y técnicas examinados en pruebas nacionales,
concluyen especialistas de la Secretaría de Educación Pública
(SEP).
Detrás de estos bajos resultados se hallan las
precarias condiciones en que operan las telesecundarias: poco menos de
la tercera parte carece de agua potable y 73 por ciento dice no tener drenaje;
uno de cada cuatro planteles es ''multigrado''; más de la mitad
carece de un número suficiente de libros de conceptos básicos,
y en la tercera parte se pierde la señal de satélite durante
una o más horas.
En el estudio Evaluación de la educación
en México, publicado por el Centro Nacional de Evaluación
(Ceneval), Carmen Noriega y Anette Santos del Real -una de las responsables
del proyecto de reforma de la enseñanza secundaria- advierten que
las telesecundarias están contribuyendo a reproducir las desigualdades
sociales de sus alumnos -la mayoría habitantes de zonas rurales-,
en vez de compensarlas.
Además de las condiciones físicas de la
escuela, señalan que la situación socioeconómica de
los alumnos influye en los bajos resultados. El siguiente dato es revelador:
el promedio de ingreso per cápita de las familias de alumnos de
telesecundaria (429 pesos) es significativamente inferior a los promedios
familiares de los jóvenes que provienen de planteles generales y
técnicos (800 y 776 pesos).
De esencia rural
Desde 1968 las telesecundarias ofrecen educación
a jóvenes que viven en comunidades rurales pequeñas, alejadas
de los centros urbanos, donde -según la SEP- resulta "incosteable"
establecer secundarias generales o técnicas.
En 2003 había 15 mil 871 planteles que, en conjunto,
atendían a casi un millón 200 mil estudiantes, lo que significa
que tres de cada 10 alumnos en nivel medio lo hacían en una telesecundaria,
explica la investigación.
Las expertas de la SEP señalan que, no obstante
la "invaluable" contribución del sistema para llevar educación
a jóvenes que habitan en poblaciones marginadas, las evidencias
respecto de la eficacia de esta modalidad son "desalentadoras".
Para su investigación toman como base los resultados
que casi 400 mil jóvenes obtuvieron en el examen nacional de ingreso
a bachillerato, aplicado por el Ceneval.
Los estudiantes de telesecundaria logran promedios ''significativamente
inferiores'' a los de los estudiantes de las secundarias generales y técnicas
en cada una las disciplinas y en el porcentaje global de aciertos.
Las diferencias mayores entre egresados de telesecundaria
y de las otras modalidades se dan en habilidad matemática, biología,
química y español, y las menores se aprecian en matemáticas
y física.
Las autoras consideran que el bajo rendimiento de los
alumnos en habilidades verbales y matemáticas podría estar
revelando que desde primaria recibieron una formación de menor calidad
en comparación con estudiantes de otras modalidades.
Señalan que las secundarias generales y técnicas
también contribuyen a reproducir la desigualdad social, porque siempre
son los alumnos más pobres quienes obtienen los menores porcentajes
de aciertos.
Pero el hecho de que los alumnos de telesecundaria obtengan
peores resultados que sus pares permite ''cuestionar de manera más
enfática la capacidad de sus escuelas para compensar las desventajas
de origen".
Es evidente, de acuerdo con este estudio, que la situación
socioeconómica de los estudiantes de telesecundaria es desventajosa.
Por ejemplo, el porcentaje de alumnos que trabajan (18.5 por ciento) es
mayor que el de estudiantes trabajadores de las otras dos modalidades (en
ambas es de 13.5 por ciento).
Las diferencias entre los promedios de habitantes por
vivienda también son notables: telesecundaria, 2.1; general, 1.9,
y técnica, 1.8.
En las conclusiones, las expertas de la SEP reconocen
que al terminar este estudio sintieron "desaliento e indignación",
pero también una suerte de esperanza, porque algunas escuelas están
obteniendo buenos resultados, a pesar de las condiciones de pobreza en
las que trabajan.
Frente a ello, proponen asegurar los recursos humanos
e insumos didácticos para el funcionamiento de estos planteles,
así como impulsar acciones pedagógicas e incrementar el presupuesto
para esta modalidad y definir criterios de distribución que den
preferencia a los más pobres.
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