Aplica unilateralmente acuerdos de San Andrés, dice

Samuel Ruiz celebra que el EZLN haya dejado la vía de la violencia

JOSE ANTONIO ROMAN

Ante la imposibilidad de reiniciar el diálogo con el gobierno federal, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) ha empezado la "aplicación unilateral" de los acuerdos de San Andrés, sostuvo el obispo emérito de la diócesis de San Cristóbal de las Casas, Samuel Ruiz García, quien lamentó que todavía les falta un largo camino de sufrimiento a las comunidades indígenas, pese a los avances alcanzados en el reconocimiento de sus derechos.

En conferencia de prensa, luego de una misa en la basílica de Guadalupe por sus 80 años, el prelado hizo una crítica a la institución eclesiástica. Sostuvo que el modelo de Iglesia católica existente hasta ahora, que se expresa preponderantemente en su jerarquía, ha sido rebasado y no responde ya a las inquietudes ni a las expectativas y evolución del mundo de hoy.

Dijo que el Congreso Eucarístico Internacional, recientemente realizado en la ciudad de Guadalajara, ha sido la última manifestación posible de este modelo "rebasado", en el cual "la jerarquía apareció como lo más importante, los sacerdotes se perdían un poco más masificados y la masa era la masa. Si Pedro viniera en este momento de la historia no reconocería a la Iglesia en la cual él empezó a trabajar".

La celebración de ayer en el santuario guadalupano, organizada por diversos grupos civiles y religiosos, fue encabezada por los obispos eméritos de Huautla, Oaxaca, Hermenegildo Ramírez, y de Saltillo, Raúl Vera López, quien destacó la labor pastoral de Samuel Ruiz a lo largo de más de 40 años, tarea en la que se distinguió siempre por la defensa de los derechos humanos, en especial de los pueblos y de las comunidades indígenas. A la celebración acudieron, entre otros, el religioso dominico Miguel Concha y el padre Joel Padrón.

En la conferencia de prensa, el obispo Ruiz, siempre a pregunta expresa, se refirió a la situación indígena en el estado de Chiapas. Planteó que aun cuando estos pueblos han venido ganando espacios, todavía les queda un camino muy doloroso para el futuro. Respecto al EZLN, puntualizó que pese a esta difícil situación y al rechazo del Congreso de la Unión de aprobar los acuerdos de San Andrés, esta organización no ha tomado las armas, sino que ha decidido aplicar de manera unilateral dichos acuerdos, principalmente mediante la creación de los municipios autónomos y de la conformación de las llamadas juntas de buen gobierno.

"Avizoramos que con esto se mantiene una actitud positiva, de ir cotizando esto por caminos de presiones, de manifestaciones, de exigencias, pero no por la violencia de la cual ellos mismos han dicho que no era la opción, pero que habían sido forzados a ella", expresó.

De buen humor, acompañado por el obispo Raúl Vera y el padre Joel Padrón, Samuel Ruiz advirtió que por la falta de reconocimiento del gobierno de que no hubo una "palabra verdadera" en lo que habían sido los acuerdos firmados, será muy difícil reimpulsar cualquier forma de diálogo.

En un mensaje elaborado con motivo de sus 80 años, el prelado en retiro recordó varias etapas de su vida, como su participación activa en el Concilio Vaticano II (1962-1965) y en varias de las conferencias generales del Episcopado latinoamericano (Celam).

Señaló que una iluminación significativa del Concilio Vaticano II fue definir a la Iglesia como "pueblo de Dios", con lo cual se inició el camino hacia un nuevo modelo en el que los cristianos dejan de ser "masa amorfa" dirigida por la jerarquía como vértice, para ser considerados como "sujetos e hijos de Dios".

Otra cosa no menor del concilio, agregó, fue reconocer la exigencia de un diálogo entre la Iglesia y el mundo, en el cual la primera ayuda al segundo a promover la fraternidad, a reconocer, a vivir y a defender los derechos humanos, para que haya una verdadera igualdad, y de esta manera contribuir a que el mundo se transforme.