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México D.F. Lunes 11 de octubre de 2004
CIUDAD PERDIDA
Miguel Angel Velázquez
Chicanada, la detención de Ponce
 La justicia según la PGR
Datos que no cuadran
PODRIAMOS DECIR, así, sin agregar nada, para ser exactos: šqué poca vergüenza! al referirnos, desde luego, a la actitud de la PGR en lo que hace a la detención de Gustavo Ponce. Pero bien vale la pena ofrecer al lector otros elementos de juicio.
LA HISTORIA es cosa larga, se inició hace más de 200 días y es, aún hoy, la causa de los mayores ataques hacia el gobierno de la ciudad de México, pero también es parte del episodio de la mayor deshonra para el gobierno de Vicente Fox y el Poder Judicial Federal del país, que decidió tenderse a los pies del poder.
LA APARICION, o la sospechosa captura, de Ponce no podrá explicarse como una acción de la justicia desprovista de rasgos de venganza política, porque la Procuraduría General de la República, una vez más, tomó la vía de la chicanada.
ES IMPORTANTE recordar que la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal solicitó la aprehensión de Ponce desde marzo pasado, y fue el día 11 de ese mes cuando el juez 11 penal giró la orden para el arresto y, además, entre la PGR y la PGJDF, es decir, entre las dos procuradurías existió un acuerdo para colaborar en el rastreo y captura del ex funcionario.
DESDE LUEGO, como es obvio, la colaboración se fue al caño, porque Ponce, al igual que Ahumada, pasaron a ser, cuando menos en las primeras horas después de su captura, hombres de la PGR y a las autoridades capitalinas simplemente se les hizo a un lado.
EN EL caso de Ponce el asunto se vuelve turbio porque resulta que es arrestado por una orden que impone, u obsequia, como se dice en el mundo de los abogados, un juez del estado de México y no por las que ya se habían girado en la capital.
DE ESA manera Ponce no entraría directo en alguno de los reclusorios de la capital, donde podría haber sido interrogado por la autoridad correspondiente del DF, sino al del mismo estado México, es decir, quedaría en manos de la PGR.
COSA CURIOSA, apenas cuatro días antes de la aprehensión, si es que así se dieron los hechos, el juez del estado de México obsequió la orden de captura, lo que hace pensar que ya se tenía un plan bien estructurado para dejar fuera a las autoridades de la ciudad en el momento en que se procediera al arresto de Ponce.
ENTONCES PODRIA tomar forma el rumor que advierte que Ponce ya estaba en manos de los agentes de la Agencia Federal de Investigación cuando se pidió al juez la orden de aprehensión.
OTRO DATO interesante es el video que la propia PGR mandó a las televisoras, porque allí se muestra claramente cómo los policías que "aprehendieron" a Ponce no llevaban las armas a las que nos tienen acostumbrados en operativos de este tipo, ni en el momento de la captura ni en ningún otro de los que muestra la cinta grabada.
TAL VEZ los agentes de la AFI no creyeron que Ponce fuera un delincuente peligroso, pero entonces parece inexplicable que lo mandaran a La Palma, uno de los reclusorios donde los presos aparecen asesinados, o tal vez lo conocían tan bien que no era necesario ni siquiera esposarlo.
TAMBIEN PARA el análisis resulta bueno recordar que Ponce había prometido, un día después de la exhibición del video que lo muestra apostando dinero en Las Vegas, presentarse a explicar el caso en una conferencia de prensa, pero cuatro o cinco días más tarde cambia su actitud y acusa al jefe de Gobierno de haberle ordenado desviar recursos para financiar obras en el Distrito Federal.
PARA ESE entonces, Gustavo Ponce Meléndez ya había desaparecido. Hoy, cuando parece que muchos misiles disparados en contra de la administración capitalina han fallado, y cuando se necesita volver a echar a andar las dudas sobre la honestidad del gobierno de la ciudad, el ex secretario de Finanzas aparece
VAYA JUSTICIA, Ƒno le parece?
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