México D.F. Martes 14 de septiembre de 2004
Trepado en una cornisa, defiende los derechos de padres divorciados a ver a sus hijos
Activista disfrazado de Batman burla vigilancia del Palacio de Buckingham
Enorme descrédito para la policía, consideran la oposición británica y los medios informativos
AFP, DPA Y REUTERS
Londres, 13 de septiembre. Jason Hatch, un pintor de brocha gorda, de 33 años, logró burlar hoy la vigilancia de la guardia real y, enfundado en un disfraz de Batman -el hombre murciélago-, trepó hasta una de las cornisas del Palacio de Buckingham, residencia de la reina de Inglaterra, para hacer una manifestación pública en defensa del derecho de los padres divorciados a ver a sus hijos.
Hatch, quien milita en una organización llamada Padres por la Justicia (Fathers 4 Justice) logró pasar la valla de hierro del edificio y luego colocó una escalera sobre la fachada; subió rápidamente antes de que fuera detenido por la policía.
De pie en la cornisa, mantuvo un precario equilibrio durante cinco horas. Desde una altura de 10 metros, el encapuchado hizo gestos de victoria ante los transeúntes y lanzó proclamas en favor de una reforma a las leyes civiles que reglamentan el derecho de custodia de los hijos, con el propósito de facilitar y multiplicar los encuentros con los padres.
Para que Hatch cumpliera con su misión, varios militantes de la agrupación distrajeron a los guardias en la puerta principal del palacio, cuando eran las dos y media de la tarde. Otro miembro de la organización, David Pyke, disfrazado de Robin, fue interceptado por la policía cuando se disponía a secundar las acciones de Hatch. Los agentes lograron pararlo con la amenaza de dispararle si no detenía su paso.
Creada en diciembre de 2002, Padres por la Justicia difunde su misión y sus proyectos mediante "acciones no violentas y espectaculares, con algo de buen humor". La asociación saltó a la luz pública en mayo pasado, al penetrar hasta la sala de sesiones de la Cámara de los Comunes, para lanzar contra el primero ministro Tony Blair preservativos que contenían un polvo violeta, que no era más que harina teñida.
La facilidad con la que el también autodenominado "ejército de los padres" ha traspasado las líneas de seguridad en instalaciones supuestamente resguardas milimétricamente, ocasionó este lunes un escándalo en círculos políticos, aun cuando la reina Isabel II de Inglaterra no se encuentra en estos días en Buckingham, porque está de vacaciones en Escocia.
El incidente fue calificado por la oposición británica y los medios de información de "enorme descrédito" para la policía. Los legisladores cuestionaron la facilidad con la que algun hombre armado podría cometer un atentado en la misma residencia real. El ministro del Interior, David Blunkett, tuvo que salir en defensa de la policía. "La decisión fue totalmente correcta", dijo el funcionario en referencia al hecho de que los agentes de seguridad no dispararon contra Hatch.
A eso de las siete de la noche, Batman aceptó entregar una pancarta en la que se leía: "Super papá de Padres por la Justicia lucha por el derecho a ver a sus hijos". Minutos más tarde, el hombre murciélago descendió con un puño en alto, con el apoyo de una grúa y fue arrestado por la policía.
šSANTO COLADO! EN EL PALACIO DE BUCKINGHAM Jason Hatch, de 33 años, burló la vigilancia de la guardia real y, enfundado en un disfraz de Batman, trepó a una de las cornisas de la residencia de la reina de Inglaterra para exigir el derecho de los padres divorciados a ver a sus hijos. El también pintor de brocha gorda milita en la organización Padres por la Justicia (Fathers 4 Justicie) y se mantuvo en el lugar, en precario equilibrio, durante cinco horas FOTO REUTERS
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