Nueve firmas interesadas

Requiere 6 mil mdd el tren bala DF-Guadalajara

La construcción del tren bala entre las ciudades de México y Guadalajara representará una inversión en infraestructura de 6 mil millones de dólares y constaría de dos escalas intermedias, una en Querétaro, en el estado del mismo nombre, y otra en Irapuato, Guanajuato, de acuerdo con datos proporcionados en la licitación.

El tren bala correría a una velocidad mínima de 300 kilómetros por hora y a una máxima de 450 kilómetros por hora.

La licitación se lanzó en diciembre pasado y hubo una petición de ampliar los plazos por parte de los interesados. El fallo de las autoridades federales se espera en breve.

Hay nueve empresas interesadas en competir por este proyecto, de las cuales seis son extranjeras y tres mexicanas, entre las que destaca la firma IAMSA, de Roberto Alcántara Rojas, quien estuvo al frente de Bancrecer y cuya deuda de 109 mil millones de pesos es una de las más importantes que se canalizaron al Fobaproa. Alcántara, actual coordinador de la comisión de financiamiento del CEN del PRI y empresario del sector camionero, podría adjudicarse la licitación pública para la construcción del tren rápido México-Guadalajara, a través de IAMSA.

Los Alcántara Rojas adquirieron Bancrecer durante el sexenio de Carlos Salinas de Gortari; pero la privatización de la banca en México se realizó con ''banqueros inexpertos'', cuyos errores derivaron en la deuda del Fobaproa, que hoy se paga con impuestos de los contribuyentes.

El proyecto del tren bala representa un reto financiero importante por el monto de inversión pues, junto con los planes del tren suburbano Buenavista-Huehuetoca, es una de las metas del actual gobierno federal en materia de infraestructura y de recuperación del tren de pasajeros como medio de transporte.

A su vez, especialistas advirtieron que el proyecto de inversión entraña riesgos, como en su momento lo representaron los programas carretero y bancario, rescatados por el gobierno federal.

Un tren para 100 millones

En cuanto al tren suburbano, se ha establecido una estrecha coordinación entre los gobiernos del Distrito Federal y del estado de México para hacer un reordenamiento en el transporte urbano.

El tren transportaría a 100 millones de pasajeros al año, si se considera que es una de las zonas más pobladas del mundo, detrás de Bangladesh. De concretarse, el proyecto evitará un sinnúmero de viajes y de cruces vehiculares, tanto de automóviles particulares como de autobuses y microbuses del transporte público.

Asimismo, se reducirían los congestionamientos viales en la ciudad de México, así como la contaminación en toda la zona metropolitana; los usuarios verán disminuido el tiempo de traslado en casi 2 horas y media, tanto de ida como de regreso.

De esa manera, el transporte urbano tendría que modificarse, ya para no correr de manera longitudinal, sino transversal, es decir, de los centros poblacionales a las estaciones del tren, y de regreso.

Uno de los proyectos del gobierno federal para impulsar el ferrocarril como medio de transporte masivo, es el tren suburbano de Buenavista a Cuautitlán.