México D.F. Sábado 4 de septiembre de 2004
Hoy estreno mundial de la ópera de cámara
de Marcela Rodríguez
La última noche de Séneca, pretexto para
abordar la fragilidad humana
CARLOS PAUL
Nada es nuestro, todo nos es ajeno. Sólo es nuestro
el tiempo, el que nos da libertad para disponer de nuestra vida. Es la
idea central a la que llega poco antes de morir el filósofo Séneca,
figura que es llevada a escena para reflejar la fragilidad humana, el autoritarismo,
la inutilidad de las palabras y sus relaciones amorosas.
Séneca
o Todo nos es ajeno es el título de la ópera de cámara
compuesta por Marcela Rodíguez, inspirada en el libreto de Carlos
Thiebaut, que hoy a las 19 horas se presentará en estreno mundial,
en la sala Miguel Covarrubias, dentro de la versión seis del Festival
Internacional Música y Escena.
El montaje presenta desde el principio el nudo del conflicto:
la última noche de Séneca, cuando Nerón cansado de
las críticas de su antiguo maestro, lo condena a muerte; y el filósofo
debe escoger cómo morir, sea con por la espada o el suicidio.
Tal situación dramática sirve de pretexto
para que conforme se acerca el desenlace, se desarrollen algunas de las
ideas filosóficas del pensador, en las voces del barítono
Armando Gama, la soprano Irasema Terrazas, quien interpreta las mujeres
de Séneca; y el tenor Oscar de la Torre.
La partitura de Rodríguez ''consigue líneas
vocales y musicales extraordinariamente hermosas, con cadencias árabes
y flamencas, considerando que Séneca nació en Córdoba,
España y se crió en Egipto", explicó José Areán,
director musical del montaje.
Esta ópera ''es esencialmente melódica sin
dejar de ser compleja, con texturas densas, oscuras, que apoyan muy bien
las partes dramáticas cuando se expresa la voz".
Una serie de inclinadas columnas romanas, dos bancas y
una mesa blancas, donde Séneca estoico escribe, y una especie de
reloj de agua son los únicos elementos escenográficos que
contrastan con una gran pantalla en la cual aparecen los recuerdos amorosos
del filósofo y se ve lo que podría interpretarse como el
reflejo abstracto de sus emociones horas antes de morir. Conforme transcurre
el drama de manera paulatina y paralela se aprecia cómo las mujeres
de Séneca (una prostituta, una amante y su esposa) son las que le
han enseñado lo que podría ser las más importantes
lecciones de la vida.
Las imágenes del pensador y dichos amores proyectadas
en video sirven como contrapunto musical y se presentan retocadas, explicó
Juliana Faesler, directora del montaje y responsable de la escenografía
e iluminación.
Nicolás Pereda, quien se encargó de filmar
en 16 mm, ''rayó el negativo, cuadro por cuadro, dando como resultado
una especie de imágenes intervenidas".
Con la participación de ocho músicos del
Ensamble Signos, la ópera de Marcela Rodríguez Séneca
o Todo nos es ajeno se estrena hoy a las 19 horas y mañana a
las 18 horas en la sala Miguel Covarrubias del Centro Cultural Universitario
(Insurgentes Sur 3000).
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