Los entrevistadores colocan sellos sin cuestionar a moradores de viviendas pobres: colonos

En Chimalhuacán denuncian irregularidades para seleccionar a beneficiarios de Oportunidades

RENE RAMON CORRESPONSAL

Chimalhuacan, Mex., 29 de agosto. Esther Cuenca Nerón gana 15 pesos al día en un taller de maquila, su esposo está desempleado y tiene dos hijos que suben y bajan el cerro para trasladarse de su casa a la preparatoria. Cuando intentó inscribirse al programa Oportunidades y obtener una beca para sus hijos no fue tomada en cuenta porque personal de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso) argumentó que, como su vivienda tenía techos de losa, "no era pobre".

Esther es una de las más de 500 mujeres que aseguran hubo "irregularidades" en la aplicación de encuestas que realizó personal de la Sedeso entre ciudadanos de este municipio, interesados en formar parte del programa federal.

A seis meses de que Oportunidades llegó a Chimalhuacán para atender la pobreza extrema, en 52 colonias ya se aplicó el cuestionario y en total se ejecutarán 20 mil acciones, con más de 80 millones de pesos.

No obstante, faltan 19 colonias por censar, 10 totalmente y el resto de manera parcial. Además, decenas de mujeres inconformes han acudido al palacio municipal para denunciar varias anomalías; por ejemplo, explicaron que en reiteradas ocasiones los empleados de la Sedeso colocaron sellos de censo en las viviendas, pese a no haber encuestado a sus moradores.

Otra de las acusaciones fue que los entrevistadores decidieron no aplicar los cuestionarios a familias cuyas casas tuvieran techo de losa, "porque no son pobres".

Ese fue el caso de Esther Cuenca, cuya vivienda se ubica en la calle Miramar de la colonia Xochitenco parte alta, que habita en un terreno con tres cuartos aún sin aplanar, el cual carece de barda perimetral, cisterna y tinaco.

Aunque el programa busca beneficiar a los niños que estudian, a los encuestadores no les interesó saber que esta mujer tiene cuatro hijos, dos en la primaria y dos en el nivel medio superior. Uno camina más de tres kilómetros porque los microbuses que vienen de su escuela, el Colegio de Ciencias y Humanidades plantel oriente, sólo llegan hasta el municipio de Nezahualcóyotl. A los cuatro les da diariamente de desayunar café con un bolillo y cuando están de regreso les sirve frijoles con huevo.

La casa de Miriam Barrios Guzmán se ubica en la calle Las Flores, del barrio de Santa María Nativitas, y está compuesta de una habitación de cuatro metros por cuatro, una recámara, sala-comedor y cocina. Su esposo está desempleado y "se las ve negras" para enviar a su hijo a la escuela. Nunca fue entrevistada, pero en la fachada de su casa se observa el sello de censada.

Daniel Serrato Díaz, director general adjunto de operación en la coordinación nacional del programa Oportunidades, admitió la posible existencia de errores "de operatividad", pues explicó que si bien no se puede beneficiar a la gente que viven en las 52 colonias más pobres de Chimalhuacán, la normatividad les exige encuestar a todos quienes la conforman. "Se les dará su derecho de audiencia, merecen una revisión, y se les dará la respuesta oficial", dijo.

Aceptó que pudo haber errores operativos debido a que "a la gente pobre le avergüenza su circunstancia y no la reconoce, y a veces niega información y queda fuera".

Informó que en el estado de México 370 mil familias serán beneficiadas con 4 mil pesos al año, lo que implicará un desembolso de mil 150 millones de pesos. El apoyo es diferenciado, apuntó, y depende del grado de estudios de los menores.

El presidente municipal Miguel Angel Cacique señaló que "por el bien de la credibilidad de este programa, creemos que se debe mejorar".

Puso como ejemplo el caso de Acuitlapilco, donde se aplicaron 5 mil encuestas y sólo se benefició a mil 900 personas, siendo que es una de las comunidades más pobres de la zona oriente de la entidad.