México D.F. Lunes 23 de agosto de 2004
El recurso interpuesto por el PRI sólo genera incertidumbre, afirma Elizondo
Energía: "improcedente", la demanda para anular el CSM aprobado a Repsol
DAVID CARRIZALES CORRESPONSAL
Monterrey, NL., 22 de agosto. Demandas como la que presentaron legisladores del Partido Revolucionario Institucional (PRI) contra las empresas Petróleos Mexicanos y Repsol para exigir la nulidad del contrato de servicios múltiples (CSM) otorgado a la trasnacional son "totalmente improcedentes" y tienen "clara intencionalidad política", afirmó el secretario de Energía, Fernando Elizondo Barragán.
Aseguró que dichas querellas "le están haciendo un gran daño al país, porque ahuyentarán las inversiones y provocarán encarecimiento de los servicios especializados que requiere la industria energética nacional".
Según el funcionario, las demandas "lo que están haciendo es sembrar incertidumbre". Y se quejó: "mientras un gran grupo" de legisladores siga aferrado en sostener "una idea absurda de soberanía" y se niegue a permitir la inversión privada para producir gas natural, la industria y los consumidores mexicanos seguirán pagando carburantes a precios elevados, los más caros del mundo, "porque somos dependientes de Estados Unidos a pesar de que tenemos potencial para exportar en lugar de importar grandes volúmenes del producto.
"Por eso es muy importante que no nos vayamos con la idea de que defender la soberanía es aferrarnos a nuestros recursos. Defender nuestra soberanía es actuar con nuestros recursos, de manera que no dependamos del extranjero como sucede actualmente", asentó Elizondo.
Expuso que el país no solamente requiere duplicar de mil a 2 mil millones de pies cúbicos diarios el gas natural en la cuenca de Burgos, sino adicionalmente traer gas licuado de Bolivia, Perú, Rusia o Australia, para colocarlo en las playas o costas mexicanas a un precio de 3.50 dólares por millón de BTU y no depender tanto de Texas, que es un mercado deficitario y donde además el energético se cotiza a 6.50 dólares por millón de BTU.
"Mientras tanto, nosotros seguiremos trabajando para que gente aferrada a una idea de soberanía que ya pasó y que consistía en no dejar que nadie tocara nuestros recursos cambie su mentalidad, para ver cómo podemos sacar mejor provecho de nuestros recursos", expresó el funcionario federal.
Por último, estableció: "a mí qué me importa quién haga el pozo. Lo que importa es que va a salir gas, que me hará no depender de Estados Unidos".
|