Señala que el informe de la Comisión Nacional de Derechos Humanos no es integral

Advierte el gobernador de Jalisco que no castigará a represores de altermundistas

Guadalajara, Jal., 17 de agosto. El gobernador de Jalisco, Francisco Ramírez Acuña, anunció hoy por la noche que no iniciará procedimientos administrativos contra los servidores públicos de los cuerpos policiacos acusados de cometer actos crueles y degradantes contra más de 100 personas que protestaron -el pasado 28 de mayo- durante la Cumbre de América Latina, el Caribe y la Unión Europea realizada en Guadalajara, y lamentó que el informe especial de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) "no sea integral".

El mandatario desacreditó y criticó el informe especial de la CNDH porque se limitó, aseguró, a dar credibilidad total a la versión de los que "generaron la violencia y se presentan hoy como víctimas". Advirtió que no cederá ante las "presiones que ejercen grupos que sistemáticamente realizan movilizaciones violentas", y rechazó que esa entidad se torture: "en Jalisco no hay represión ni tortura".

En un mensaje al pueblo de Jalisco, Ramírez Acuña indicó que aceptará parcialmente "las propuestas" que señala la CNDH, entre las que se encuentran aplicar con puntualidad los lineamientos que obran en las leyes del estado para "garantizar a los particulares el respeto a sus derechos"; apoyar, "como lo hemos hecho desde siempre", a los organismos defensores de derechos humanos, e intensificar la instrucción y capacitación con relación al respeto que deber observarse a las garantías individuales en todas las dependencias de seguridad pública.

Pero insistió: "no se acepta dar vista al procurador de Justicia del estado ni iniciar procedimientos administrativos en contra de servidores públicos de los cuerpos policiacos, porque en el informe rendido no se advierten, en este momento, indicios que hagan presumir la responsabilidad de servidores públicos".

Ramírez Acuña negó una y otra vez que los cuerpos policiacos del estado hayan torturado a las personas aprehendidas, y defendió la "legalidad de las detenciones" de quienes fueron puestos a disposición de la autoridad, "lo que confirma -dijo- el actuar a derecho de las corporaciones policiacas".

La CNDH dio a conocer el lunes un informe especial en el cual concluye que los cuerpos policiacos de Jalisco incurrieron en retenciones ilegales, tratos crueles, degradantes, torturas físicas y sicológicas.

Soberanes Fernández reprobó la actitud de las autoridades de Jalisco por no brindar las facilidades necesarias a la CNDH ni a la Comisión Estatal de Derechos Humanos, a las que se impidió el acceso a las instalaciones donde fueron llevados los detenidos.