.. |
México D.F. Lunes 16 de agosto de 2004
Carlos Fazio
Líber Seregni
El sábado 31 de julio murió en Uruguay el general retirado Líber Seregni (Montevideo, 1916-2004), militar civilista y constitucionalista, cofundador de la coalición de izquierda Frente Amplio. Figura emblemática de las fuerzas progresistas de América Latina, durante el último cuarto del siglo pasado Seregni fue el máximo líder y estratega del bloque que quebró el histórico bipartidismo político uruguayo.
Militar de carrera, Líber Seregni ascendió a general en 1963 y, tras ocupar las jefaturas de las dos regiones militares más poderosas del ejército uruguayo, asumió de manera transitoria el comando del arma en 1968. Ese año debió cumplir delicadas misiones en medio de un clima de creciente descontento social, luego de la asunción a la presidencia de Jorge Pacheco Areco (6 de diciembre de 1967).
En noviembre del 68, en un momento de auge de las luchas sindicales y estudiantiles y de grandes confrontaciones parlamentarias impulsadas por los partidos políticos de la izquierda clasista, enmarcadas por las acciones de la guerrilla tupamara, Seregni solicitó su pase a retiro, por diferencias con las medidas represivas de Pacheco, que le fue concedido en abril de 1969. En 1971 surgió el Frente Amplio y Seregni es nombrado su presidente, cargo que mantuvo hasta su renuncia en 1996.
Detenido por primera vez el 9 de julio de 1973 -luego de una multitudinaria manifestación en contra del golpe de Estado de Juan María Bordaberry, en representación de la oligarquía uruguaya y con apoyo del embajador de Estados Unidos, mister Ernest Siracusa, Seregni, sin asistencia letrada, fue acusado por la "justicia militar" por los delitos de asonada, instigación pública a desobedecer las leyes y a usurpar funciones públicas, encubrimiento de atentado a la Constitución y a la fuerza moral del Ejército y la Marina, así como de atentado a la Constitución en grado de conspiración. Sometido a un tribunal de honor militar fue declarado "traidor a la patria" por sus pares putchistas y degradado en 1974. Desde entonces, sus compatriotas comenzaron a llamarle "general del pueblo".
En noviembre de ese año fue puesto en libertad provisional, pero sería recapturado en enero de 1976. En total pasaría 11 años preso, procesado y condenado en primera instancia a 14 años de penitenciaría, la pérdida de su estado militar y la inhabilitación política absoluta por 10 años.
Pocos días antes de su primera detención, Líber Seregni había declinado el ofrecimiento de asilo político que le había hecho llegar la embajada de México en Montevideo. Sus nexos con nuestro país eran añejos. En los años 40, adscrito a la embajada de Uruguay en Washington como agregado militar, había realizado estudios de astronomía y física en el observatorio de Tonantzintla, Puebla, al lado de Guillermo Haro.
En 1945, al fin de la Segunda Guerra Mundial, el capitán Seregni, de 28 años, participó como secretario de la delegación uruguaya a la Conferencia Interamericana Extraordinaria sobre los Problemas de la Guerra y la Paz (Acta de Chapultepec), en la que se creó el sistema defensivo interhemisférico, antesala de la Conferencia de San Francisco de donde nacerían las Naciones Unidas y la guerra fría. Mientras alternaba con poetas, campesinos, científicos, revolucionarios, políticos, estudiantes y diplomáticos, también participó en el Congreso Americano de Matemáticas en Guadalajara y en el de Astronomía y Física.
Seregni fue liberado el 19 de marzo de 1984. De inmediato apoyó negociar con los militares un acuerdo que permitió realizar elecciones ese mismo año, a las cuales no fue autorizado a postularse. Volvió a ser candidato a la Presidencia en noviembre de 1989. El Frente Amplio, en constante crecimiento, dividió aritméticamente en tres al electorado uruguayo en las elecciones nacionales de 1994, y podría alcanzar el gobierno en los comicios de octubre venidero.
Como dijo Eduardo Galeano en 1997, en un país de paradojas, "el símbolo de la dignidad civil en Uruguay es un militar, que se llama Líber Seregni". Sus diferencias con la jerarquía militar llegarían hasta el momento de su muerte. Pocos días antes de fallecer a causa de un cáncer, la restitución del retrato de Seregni en la Galería de Comandantes del Ejército, del que había sido descolgado en 1973 por los mandos golpistas, suscitó un serio incidente en el generalato. El comandante en jefe del arma, Santiago Pomoli, impuso una dura sanción al general Francisco Wins, por la restitución del cuadro. Pero el presidente Jorge Batlle intervino y ordenó que el cuadro permaneciera colgado.
En medio de ese jaloneo, su deceso auguraba mayor confrontación. No obstante, el siempre pequeño Batlle esta vez estuvo a la altura de las circunstancias. Los restos mortales de Líber Seregni fueron inhumados con honores de ministro de Estado en el Panteón Nacional del Cementerio Central, luego de haber sido velado en el Palacio Legislativo. Una multitud pocas veces vista acompañó el cortejo fúnebre por las calles montevideanas. En el último tramo, el ataúd cubierto por el pabellón nacional, su bastón de mando sobre él, fue instalado en la cureña del Regimiento de Blandengues de Artigas. En una de las veredas, a la izquierda del general, se agolpaban miles de frenteamplistas ondeando sus banderas. En la otra (a la derecha) estaba instalada la guardia de honor, con representantes de todas las ramas de las fuerzas armadas. La banda policial interpretó la marcha fúnebre y los cañones de la artillería del ejército dispararon las salvas pertinentes. En algunas unidades castrenses sus comandantes ordenaron a sus subordinados mantenerse acuartelados.
En 1997, Seregni, de 80 años, dijo a los jóvenes: "Siempre debes estar pensando en cambiar (...) no hagas caso a quienes hablaron del fin de la historia y la muerte de las ideologías. Sueña y construye y cultiva la utopía. Vive soñando y haciendo lo que sueñes". Así hizo él. El artillero Seregni vivió su sueño y se fue arropado por el calor de su pueblo.
|