México D.F. Miércoles 30 de junio de 2004
Tres estatuas de santos y una virgen han sido dañadas en los recientes cuatro días
Ataques vandálicos causan destrozos en monumentos históricos de Venecia
AFP, DPA Y REUTERS
Roma, 29 de junio. Las autoridades de la ciudad de Venecia se encuentran a la expectativa luego de que los cuatro días anteriores un vándalo ha dañado con un martillo diversas estatuas y monumentos históricos en las inmediaciones de la Plaza de San Marcos, en pleno corazón de uno de los polos turísticos más importantes de Italia.
''Todos los habitantes, residentes o turistas, han sido invitados a señalar inmediatamente toda situación anormal, así como los daños o la presencia de personas que provoquen daños al patrimonio" artístico de Venecia, dijo el superintendente Giorgio Rossini.
La primera víctima de estos ataques vandálicos fue una estatua de Moisés del siglo XV, cuya barba y manos fueron destrozadas a martillazos el domingo por un hombre de aproximadamente 30 años, quien logró huir luego de que un grupo de turistas lo descubrió y dio aviso a la policía.
El monumento está ubicado en la columna de la Justicia del Palacio Ducal, en esa plaza veneciana. El golpe rompió en 17 pedazos las manos de Dios cuando entrega las tablas de los diez mandamientos a Moisés, pero los fragmentos fueron recuperados y la obra podrá reconstruirse.
Atentados consecutivos
La noche anterior, también fueron destrozadas las manos de estatuas de San Marcos y San Francisco, que datan del siglo XVI y están ubicadas en la iglesia del Redentor, en la isla de Giudecca, así como la efigie de San Pedro en la iglesia de San Pedro di Castello y una Virgen, en una calle cercana.
''Quizá sea la misma persona, dado que los hechos fueron tan seguidos, pero no podemos asegurarlo, ya que nadie ha sido detenido", manifestó un oficial de seguridad en declaraciones emitidas a la agencia de noticias Reuters.
El alcalde veneciano, Paolo Costa, atribuyó los asaltos a un ''lunático aislado" y descartó que vaya a aumentar la presencia de la policía o las medidas de seguridad en las calles.
Ante los señalamientos de que el sistema de vigilancia en Venecia es insuficiente, frente a los miles de turistas que la invaden cada año, el funcionario municipal aseguró que la emblemática ciudad de los canales tiene una red de video suficiente, pese a contar con una sola cámara para monitorear la Plaza de San Marcos.
''Venecia es una obra de arte, necesitaríamos cámaras de vigilancia a cada centímetro", consideró un vocero del ayuntamiento.
Símbolos del cristianismo, el blanco
De acuerdo con Giorgio Rossini y otros especialistas consultados, los actos vandálicos fueron cometidos por una persona con ''conocimientos de las sagradas escrituras", que se concentra en atacar símbolos del cristianismo.
Este hombre, conjeturaron, sufre problemas sicológicos que lo llevan a destruir símbolos precisos: las manos, las llaves de San Pedro o las tablas de los diez mandamientos.
Por desgracia, ésta no es la primera vez que el patrimonio artístico italiano es atacado por vándalos o personas con desequilibrios mentales.
El 21 de mayo de 1972, el geólogo húngaro Laszlo Toth embistió a martillazos La Piedad, de Miguel Angel Buonarroti, en la Basílica de San Pedro al grito de ''šYo soy Jesucristo!"
Con esa acción provocó daños en el rostro y un brazo de la estatua, que ahora está protegida por un domo de cristal.
En 1991, el ex religioso Piero Cannata acabó de un severo martillazo con un dedo del pie del David, escultura emplazada en la Plaza de la Señora de Florencia, y en 1997, tres gamberros rompieron la cola de mármol de uno de los monstruos marinos de la fuente de los Cuatro Ríos, de Bernini, en la Plaza Navona de Roma, considerada una de las obras maestras del barroco italiano.
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