El yucateco fue superado por Despatie y Liang en plataforma individual

Luna y Espinosa, plata en sincronizados; Pacheco, bronce

China y Rusia dominaron en la última jornada de la Súper Final de Clavados

ROSALIA A. VILLANUEVA

La pareja conformada por Jashia Luna y Paola Espinosa, así como Rommel Pacheco, cerraron con sendas medallas de plata y bronce en la Súper Final de clavados.

Luna y Espinosa, seleccionadas olímpicas en la prueba de plataforma, modalidad de sincronizados, sumaron 310.62 puntos y quedaron detrás de las campeonas chinas Lao Lishi y Li Ting (335.28).

Las rusas Natalia Gonchorova y Yulia Koltunova ocuparon el tercer puesto con 309.84.

El yucateco Rommel Pacheco abrigó esperanzas de ser uno de los fuertes contendientes que estarán en la final olímpica de Atenas al lograr la medalla de bronce en el torneo, que se adjudicó el canadiense Alexandre Despatie, quien ejecutó un impecable clavado, el último, que le dio seis calificaciones perfectas para derrotar al chino Tian Liang.

La final de plataforma individual varonil fue cardiaca para los tres clavadistas que lucieron sus mejores saltos desde que comenzó la primera de seis rondas, en la que el mexicano fue apoyado por el público local en su lucha contra el campeón mundial Despatie, a quien derrotó en los Juegos Panamericanos.

Instalado en la segunda posición de la lista de salida que el canadiense encabezaba, Rommel ejecutó dos brillantes saltos que le valieron las mejores calificaciones. Uno fue el tres y media vueltas en posición C, con el que obtuvo cuatro dieces, y el otro, el sexto, hizo tres y media atrás con un giro y medio, de 3.4 grado de dificultad, con otra calificación perfecta, para quedar en tercer lugar general (512.97).

Poco antes, el canadiense había realizado el mismo clavado y entró al agua sin salpicar, arrancando los aplausos del público que estaba a la expectativa por conocer las notas de los jueces en el pizarrón electrónico.

Apareció el primer 10, luego vino el siguiente, después otro y tres más, y de no haber sido por el neozelandés Robin Hood, que le otorgó 9.5, el joven Despatie habría logrado un récord perfecto.

Aún faltaba el chino Liang, quien encabezaba la prueba pero, como era el último la presión lo traicionó y falló el clavado decisivo para quedarse con el segundo sitio (547.77), luego de que Despatie había cerrado con 553.77 puntos.

En cuarto lugar terminó el británico Leon Taylor (451.74).

En la conferencia de prensa Rommel, quien siempre estuvo apoyado por el entrenador ruso Stanislav Pijakov y el búlgaro Stefan Martinov, reconoció que el resultado es producto del trabajo de su ex preparador Francisco Rueda, a quien algunos vieron en las tribunas de la alberca olímpica Francisco Márquez, pero el yucateco dijo que estaba en Monterrey y le dedicó la medalla.

Consideró que esta competencia marcó el parámetro de lo que se espera en los juegos de Atenas. "Me dejó un buen sabor de boca, que estoy cerca y no tan lejos (de las medallas), pero hay que seguir trabajando''.

Asesorado por el dominicano César Henderson, Despatie dijo que a pesar de no haber estado al ciento por ciento, por tener una lesión en la pierna, "fue la mejor actuación y puntuación que he hecho'' en su carrera deportiva.

Comentó que el neozelandés, quien le dio el nueve y medio, posteriormente le ofreció disculpas, pero de todas maneras se sentía "feliz y emocionado, aunque el juez me dijo que merecía ese 10''.

La despedida de Dimitri Sautin en México no fue la deseada y el ruso y su compañero Alexandre Dobroskok fueron terceros en trampolín tres metros sincronizados, detrás de los ganadores chinos Bo Peng y Kenan Wang, y de los australianos Robert Newberry y Steven Barnet, mientras que su compatriota Yulia Pakhalina ganó en la final individual de esta prueba.