Tengo confianza en que ganaremos y disfruto mi primera final, dijo el arquero rojiblanco

Los auriazules, presionados por ser favoritos: Oswaldo

AGENCIAS

Que Pumas sea considerado favorito en la final del futbol mexicano "es una presión extra" para los dirigidos por Hugo Sánchez, por lo que Chivas saldrá relajado a buscar el campeonato, comentó el guardameta Osvaldo Sánchez.

"Tengo plena confianza en que vamos a lograr el campeonato y por eso estoy disfrutando desde ahora", puntualizó.

En su larga carrera como profesional ésta será apenas su primera final para Oswaldo. Aseguró no estar presionado. Al contrario, dijo que la está gozando. "Una final es para eso, para disfrutarse".

Dijo estar seguro que con Pumas "también habrá muchachos que querrán hacer lo mismo", pero ellos tienen que cargar con el peso de ser considerados favoritos.

Y aunque es una posibilidad, Guadalajara para nada la espera. "Los que piensan que pueden perder son mediocres", aseguró el arquero rojiblanco. "Aquí nadie ha pensado en eso.

"Todos tenemos la idea fija de que podemos ganar y nunca hemos mencionado la palabra derrota, porque en situaciones más determinantes esto ha dado solidez al grupo y no veo por qué ahora debamos cambiar esa manera de pensar", señaló.

La práctica del Guadalajara se efectuó hoy en el Club Verde Valle. Al concluir, Alberto Medina confesó lo feliz que estaba. "Lo de la lesión pareció que fue hace mucho, porque ya no siento nada y la emoción ahora de estar viviendo una final creo que la coronaría muy bien con un gol contra Pumas".

Recordó que lo ha estado buscando en esta liguilla. "Contra Atlante no tuve muchas oportunidades, pero contra Toluca ya tuve dos que estuvieron muy cerca".

Medina estuvo fuera de las canchas ocho meses; regresó en el primer duelo contra Potros y desde entonces se ha mantenido en el cuadro titular.

"Cada vez he sentido mucho mejor mi nivel y sueño con anotar un gol frente a Pumas. No sé cómo, pero lo voy a buscar sin que se convierta en una obsesión, porque mi interés está enfocado principalmente en ayudar al equipo", expuso.

Por lo pronto, algunos que tenían obsesión por un boleto para el primer partido de la final, este jueves en el estadio Jalisco, terminaron enojados, porque las taquillas del inmueble no duraron ni dos horas abiertas.

Los expendedores de los boletos bajaron las cortinas y no dieron ninguna explicación a los aficionados que hacían largas filas.

Elementos de Seguridad Pública y de Inspección y Vigilancia del ayuntamiento de Guadalajara no sabían si mañana habría venta de entradas. Lo único que podían asegurar es que hoy las taquillas estarían cerradas.