México D.F. Lunes 10 de mayo de 2004
Blair se disculpa por los maltratos de soldados
británicos a presos del país ocupado
Londres sabía dede hace un año de las
torturas en cárceles iraquíes: AI
Crece la presión política contra el primer
ministro; su imagen dañará al laborismo, dicen
AFP, DPA, REUTERS Y THE INDEPENDENT
Paris, 9 de mayo. El primer ministro británico,
Tony Blair, se disculpó hoy en la capital francesa por las denuncias
de torturas que enfrentan soldados británicos en el sur de Irak,
mientras crecen las presiones políticas en su contra luego que Amnistía
Internacional (AI) informó que su gobierno fue advertido desde hace
un año de los abusos en centros de detención iraquíes,
y parlamentarios pidieron al gobierno hacer público un informe que
recibió del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) en
febrero sobre el trato a prisioneros en cárceles bajo control de
la coalición.
Blair, quien participó en la celebración
del Día de Europa junto al presidente francés, Jacques Chirac,
concedió esta noche una entrevista a la cadena de televisión
francesa FR3, en la que admitió claramente que algunos soldados
británicos en Irak son responsables de las torturas a las que fueron
sometidos prisioneros iraquíes.
"Ofrecemos disculpas a todos aquellos que han sido maltratados
por nuestros soldados. Es absolutamente inaceptable", declaró Blair.
"Los responsables de tales actos y que se comportaron
de manera repugnante serán castigados según las reglas de
la disciplina militar... No es la manera de comportarse de la mayoría
de nuestros soldados", aseguró.
Por la mañana, en el Palacio del Eliseo, Blair
se expresó en favor de que la Organización de Naciones Unidas
(ONU) asuma el control político de la transición política
en Irak después del 30 de junio, cuando será devuelta la
soberanía.
Chirac, por su parte, denunció los abusos cometidos
por soldados británicos y estadunidenses en Irak. "Cada vez que
uno humilla, de una forma o de otra, crea reflejos de agresividad... El
respeto por los demás es la clave para el desarrollo y la paz del
mundo", dijo el jefe de Estado francés ante un primer ministro británico
con rostro serio.
En Londres AI apareció como una nueva piedra en
el camino de Blair al asegurar que las autoridades británicas fueron
alertadas hace un año de las acusaciones de torturas. "El gobierno
estaba enterado de estas denuncias y de la muerte de un prisionero iraquí
a manos de las tropas británicas desde mayo del año pasado",
aseguró un vocero de la organización defensora de los derechos
humanos.
AI dijo que envió un "memorándum" al Ministerio
de Defensa británico en mayo de 2003, en el que daba cuenta de prisioneros
iraquíes torturados y muertos durante su detención bajo responsabilidad
de las fuerzas británicas.
Agregó que hubo una reunión entre representantes
de la organización humanitaria y responsables de los ministerios
de Defensa y del Exterior en junio de 2003. En julio enviaron otro informe
y en octubre una carta a Geoff Hoon, ministro de Defensa, en la que manifestaban
la preocupación por la situación carcelaria en Irak.
Parlamentarios británicos exigieron desclasificar
el informe del CICR que recoge los testimonios de prisioneros iraquíes
sobre los malos tratos "sistemáticos" infligidos en las cárceles
de la coalición que son "equiparables a torturas".
El ex canciller Robin Cook, que dimitió en protesta
por la participación británica en la guerra de Irak, estimó
que es necesario que el gobierno divulgue el contenido del informe del
CICR. "Espero que tengamos una declaración de la Cámara de
los Comunes mañana (lunes)", dijo a la BBC antes de agregar que
consideraba "intolerable que todo lo que sabemos sobre este informe sea
consecuencia de una filtración en Washington", indicó.
En tanto, Roland Huguenin Benjamin, vocero de la Cruz
Roja en Londres, indicó que su organización no ofrecía
generalmente los detalles de sus informes en virtud del deber de "confidencialidad"
con los prisioneros. "No creemos que las víctimas tengan gran interés
en ver estas cosas expuestas en público", declaró Huguenin
Benjamin a la cadena de información continua Sky News.
El sábado por la noche el gobierno británico
admitió que recibió el informe en febrero, al igual que la
administración estadunidense.
En el informe, el CICR señala que "el maltrato
a los prisioneros y en particular la forma en que son preparados para los
interrogatorios violan las convenciones de Ginebra", subrayó Huguenin
Benjamin.
Por su parte, el productor cinematográfico David
Puttnam, militante laborista y amigo de Blair, pidió la renuncia
de éste como primer ministro para que su partido Laborista pueda
posicionarse de manera ventajosa ante el electorado.
"El primer ministro es sinónimo de Irak e Irak
sólo traerá malas noticias... si yo fuera él me iría
antes del receso (Parlamentario) del verano", dijo Puttnam a la televisora
ITV.
Para el productor cinematográfico, las noticias
negativas sobre Irak están dañando las perspectivas electorales
del laborismo, por lo que pidió a Blair dejar el camino libre al
ministro de Finanzas, Gordon Brown como próximo líder partidista.
Las declaraciones de Puttnam se dan cuando una encuesta
a publicarse este lunes por The Independent reveló que 55
por ciento de los británicos creen que las tropas emplazadas en
Irak deberían regresar el próximo 30 de junio, cuando la
soberanía sea devuelta a los iraquíes, mientras que 28 por
ciento considera que las fuerzas deben permanecer en el país árabe.
Colin Francombe, profesor de la Universidad de Middlesex
y responsable de la muestra, consideró que a los británicos
"les vendieron la idea de que la guerra sería temporal. La mayoría
no quiere que sea una responsabilidad permanente."
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