Galardones de la CDHDF a estudiantes, niños de la calle y con discapacidades

Premian filmes hechos por menores

Atendió la comisión el año pasado 282 quejas por violación a derechos de infantes

MIRNA SERVIN VEGA

Con la ayuda de una cámara de video, niños que viven en la calle, así como menores con capacidades especiales y estudiantes de primaria y secundaria fueron directores, productores, camarógrafos, realizadores y actores de su propia visión de la necesidad de que se respeten sus derechos humanos en la vía pública y en su familia.

Cinco videos, de alrededor de cinco a siete minutos cada uno, fueron presentados y premiados ayer por la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF).

El personal de la Dirección General de Educación y Promoción y la Dirección General de Comunicación Social de dicha comisión trabajó durante dos meses con 61 niños y jóvenes para realizar el proyecto.

Rosario, de 19 años, quien asistió con sus compañeros de la Confederación Mexicana de Organizaciones en Favor de la Persona con Discapacidad Intelectual, AC (Confe), fue una de las que más aplaudió y gritó emocionada al verse en una pantalla cinematográfica, en la cual representó, junto a sus amigos, la reconciliación entre dos personas que se lastimaron con palabras. Su obra mereció el reconocimiento al mejor trabajo en equipo.

Los alumnos de la secundaria anexa a la Normal, quienes hicieron el video No más, se caracterizaron como secuestradores, como padres preocupados e incluso como agentes antisecuestros, para reclamar su derecho a la seguridad pública por medio de su trabajo. Su video obtuvo el reconocimiento al mejor vestuario y maquillaje.

En otro cortometraje participó una pequeña doctora de apenas siete años como el personaje que notifica a los padres que su hijo muerto pudo haber sobrevivido si el hubiera recibido atención medica oportuna. El trabajo fue hecho por la primaria Villa Educativa y fueron premiados en el rubro de mejor actuación.

Participantes de la Casa del Arbol, Niños de la Calle AC y Casa Alianza IAP recrearon sus propias historias al hablar del consumo de drogas, de la vida en la calle y los riesgos a que se exponen, así como del maltrato de sus padres.

De acuerdo con datos de la CDHDF, durante 2003 recibió un total de 282 casos de niños agraviados. De éstos, 221 fueron quejas calificadas como presuntamente violatorias de los derechos humanos.

Los organismos centralizados del gobierno capitalino sumaron 257 quejas; el Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal acumuló 14 y las delegaciones en conjunto 11.

Las autoridades señaladas con más frecuencia como responsables de estas violaciones fueron la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, la Consejería Jurídica y de Servicios Legales, la Procuraduría Social y las secretarías de Seguridad Pública, de Salud y Desarrollo Social y de Cultura.

Las principales violaciones alegadas en dichas quejas fueron negativa o suspensión o prestación ineficiente del servicio público, detención arbitraria, dilación de la procuración de justicia, irregularidad en la integración de la averiguación previa, incomunicación, lesiones, falta de fundamentación o motivación legal, allanamiento de morada, amenazas y denegación de justicia.