Jura para su segundo mandato al frente de Sudáfrica

Se compromete Thabo Mbeki a luchar para erradicar la pobreza

DPA Y AFP

Pretoria, 27 de abril. El presidente de Sudáfrica, Thabo Mbeki, se comprometió hoy, al prestar juramento para su segundo mandato de cinco años, a luchar para erradicar la pobreza, y destacó el comienzo de la segunda década del fin del apartheid y del establecimiento de la democracia en el país.

Relegido en las elecciones generales del 14 de abril con un abrumador 70 por ciento de los sufragios, el mayor éxito del Congreso Nacional Africano desde su arribo al poder en 1994, el mandatario destacó que en estos años el partido ha demostrado que como africanos pueden y lograrán solucionar sus problemas.

Ante unos 50 jefes de Estado y de gobierno, en su mayoría africanos, subrayó que pese a los pronósticos que auguraban lo contrario, este país de 45 millones de habitantes ha dado muestra de una democracia estable y de la transformación en gran me-dida de sus instituciones y de la vida de millones de ciudadanos negros.

Mbeki, de 61 años, dijo que "la pobreza endémica y extendida continúa desfigurando la cara de nuestro país. Será imposible para nosotros decir que hemos restaurado totalmente la dignidad de nuestra gente mientras esta situación persista".

Resaltó que ninguno de los grandes problemas sociales a ser resueltos pueden ser solventados fuera del contexto de creación del trabajo y erradicación del apartheid.

Asimismo, acotó que "luego de ser un ejemplo notorio de falta de esperanza, Africa debe convertirse en el lugar de todas las esperanzas de la humanidad".

Hubo ovaciones para Nelson Mandela, el primer presidente negro de la nueva era democrática y héroe de la lucha contra el racismo, que le costó pasar gran parte de su vida en la cárcel. Los invitados corearon su nombre de pie.

Entre otros ovacionados estuvo el controvertido presidente de Zimbawe, Robert Mugabe. Por América Latina asistieron los mandatarios de Chile, Ricardo Lagos, y de Uruguay, Jorge Batlle.

La ceremonia comenzó con plegarias de diversas religiones, incluyendo una lectura en árabe del Corán.

Tras el juramento hubo una salva militar, y al término del acto de asunción comenzaron las fiestas para conmemorar los 10 años de democracia y del día de la libertad, que simboliza el fin de décadas del régimen de segregación racial.