La autora de Mariposa, eternidad de lo efímero cumplirá 106 años el 4 de julio

Mariana Frenk-Westheim fue aclamada en Bellas Artes

Lúcida y emocionada, la escritora y traductora departió con familiares, amigos y admiradores

Presentaron el documental biográfico sobre su vida, obra e influencia en la cultura nacional

ARTURO GARCIA HERNANDEZ

A unos meses de cumplir 106 años, Mariana Frenk-Westheim ''es un milagro" de la vida.

La frase fue acuñada por la pintora Carmen Parra y con ella estuvieron de acuerdo los asistentes -amigos, familiares, admiradores- al homenaje que se rindió a la escritora y traductora de Juan Rulfo al alemán, en la sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, la noche del lunes.

La lluvia y el caos vial no impidieron que el recinto se llenara, en lo que fue un festejo adelantado del cumpleaños de la autora (que es el 4 de julio).

Dadas las condiciones climáticas que podían afectar la salud de la festejada, ya se había descartado su asistencia, pero finalmente llegó.

Lúcida y emocionada, recibió un caluroso y prolongado aplauso del público.

Por el camino de las letras

Parte de la celebración consistió en la presentación del documental biográfico realizado por Luisa Riley, Los tres siglos de Mariana Frenk-Westheim, y de una nueva edición del libro Mariposa, eternidad de lo efímero (Ediciones Porrúa), que reúne aforismos de la escritora y dibujos de Carmen Parra.

El documental hace un recorrido por la vida, obra y profunda influencia en la vida cultural mexicana de la escritora de origen alemán (Hamburgo, 1898).

Llegó a México en 1930, huyendo de la persecución de los nazis junto con su esposo Ernst Frenk y sus hijos Sylvester y Margit, quien también estuvo presente en la celebración.

El editor Miguel Angel Porrúa, moderador del acto, recordó la primera edición de Mariposa, eternidad de lo efímero, en 1982:

''El vuelo de estas mariposas se inició en 1982, cuando dibujos y aforismos lograron sintetizar que en nuestro vertiginoso escenario ofrece un mensaje de armonía y sencillez de gran valor y vigencia."

Margit Frenk, investigadora literaria, ensayista y traductora dijo en su turno: ''Podrá parecer extraño que en esta ocasión la hija presente el libro de su madre, pero viéndolo bien no es tan extraño: aparte del gran cariño que nos une a las dos, resulta que nuestras vidas nos han conducido, no es casualidad, por el mismo camino, el de las letras".

La música, infaltable

Luego de expresar su emoción por poder participar en la presentación del libro de su madre, Margit Frenk dijo que los dibujos de Carmen Parra y los breves textos de Mariana ''vuelan a la par juntos por las páginas, liberados de todo peso, hechos ellos mismos mariposa".

Añadió que otra paradoja además de la contenida en el título del libro es que la materialidad de la tinta negra de las palabras y los dibujos ''casi se desvanece sobre el blanco papel; dibujos y palabras, que casi se dirían objetos sólidos, se desplazan por el aire desafiando la ley de la gravedad como esas maravillosas mariposas blancas que en Cuernavaca vuelan levemente en los jardines casi sin mover las alas".

La hija de Mariana Frenk-Westheim resaltó su admiración por las flores, pero hizo una revelación que en alguna medida explica su obsesión por las mariposas: ''Le causan temor y aun terror, quizá por eso suelen inmovilizarlas convirtiéndolas casi en flores, en esas maravillas que se dejan contemplar como pequeñas obras de arte, tan efímeras por lo demás como las mariposas mismas".

Convocado al festejo, Vicente Quirarte no asistió a causa de compromisos previamente contraídos, pero envió un texto que fue leído por Ana Mari Gomís, directora de literatura del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA).

Quirarte escribió que Mariposa, eternidad de lo efímero ''es un libro extraño en la literatura mexicana, y cuando digo literatura mexicana no me refiero solamente a la lista de obras y autores que integran nuestro canon, sino a los diversos campos del conocimiento con los cuales pueden relacionarse en este pequeño gran libro".

En voz de Gomís, Quirarte aseguró que ''si integramos todos sus fragmentos y leemos el texto como una anatomía del insecto policromo, tendremos una página semejante a las mejores del Bestiario de Juan José Arreola".

Con la voz entrecortada por la emoción, Carmen Parra evocó su primer encuentro con Frenk-Westheim y el principio de su amistad.

Como la música tiene un lugar muy importante en la vida de Mariana Frenk-Westheim, el festejo concluyó con la interpretación de tres obras musciales intepretadas por Rafael Urrusti, Luz María y María Teresa Frenk, nietas de la escritora.

Al acto también asistió otro nieto de Frenk-Westheim, Julio Frenk, titular de la Secretaría de Salud, así como Sari Bermúdez, presidenta del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, y Saúl Juárez, director del INBA.