México D.F. Miércoles 21 de abril de 2004
Llamados "intermitentes", se quejan por reducción en sus indemnizaciones
Protestas de trabajadores franceses ponen en riesgo al Festival de Cine de Cannes
AFP
Paris, 20 de abril. En protesta por los recortes a sus indemnizaciones por desempleo, los trabajadores del mundo del arte y del espectáculo francés iniciaron esta semana una nueva campaña de huelgas que amenaza directamente la celebración de grandes actividades culturales, comenzando por el Festival de Cine de Cannes, a realizarse en mayo.
Las personas conocidas en Francia como "intermitentes del espectáculo", es decir aquellos individuos que trabajan de forma irregular en el mundo del entretenimiento, como electricistas, encargados de sonido, técnicos y otros, se declararon en huelga el lunes por la noche durante la entrega de los premios Molière, especie de Oscares para lo mejor del teatro francés.
La ceremonia, en la que había casi dos mil personas, tuvo que cancelarse y de nada sirvió la mediación del ministro de la Cultura Renaud Donnedieu de Vabres, quien pasó horas negociando con los representantes del gremio.
Estos trabajadores, unos cien mil en Francia, se oponen a un acuerdo que reforma sus indemnizaciones de desempleados, aprobado en junio de 2003 y piden regresar al antiguo sistema, único en Europa y muy ventajoso, que dejaba al Estado francés un déficit por 850 millones de euros al año. Con el antiguo sistema, bastaba trabajar tres meses para recibir una indemnización por todo el año.
Desde el lunes, en numerosas ciudades francesas, decenas de artistas y representantes del mundo del espectáculo habían protestado en las calles en solidaridad con los "intermitentes".
Las protestas llegan en mal momento ya que es el inicio de la temporada de espectáculos en Francia y los huelguistas podrían usar las importantes manifestaciones programadas para presionar al gobierno y atraer la atención de la opinión pública.
Donnedieu de Vabres pidió el martes que "no se declare una huelga", temeroso de que se repita el fracaso del año pasado cuando por la misma razón hubo que cancelar los festivales de teatro de Avignon y Aix-en-Provence.
Admitió que el acuerdo de junio de 2003 tal vez no sea el ideal y prometió hacer propuestas concretas antes de que comiencen los festivales de verano, aunque advirtió que no "habrá soluciones milagrosas".
|