México D.F. Domingo 18 de abril de 2004
Ir más allá del tema económico para trascender al político, cultural y educativo, la meta
México busca la adhesión total al Mercosur, afirma Derbez; anuencia de países integrantes
Expone el funcionario resultados positivos al respecto durante su gira por Sudamérica
GEORGINA SALDIERNA ENVIADA
Buenos Aires, 17 de abril. El hecho de que los presidentes de México y Brasil, Vicente Fox y Luiz Inacio Lula Da Silva, respectivamente, tengan preocupaciones comunes, como la de dar rostro humano al desarrollo económico, constituye un elemento que puede coadyuvar en la adhesión de los mexicanos al Mercado Común del Sur (Mercosur), estimó aquí el secretario de Relaciones Exteriores, Luis Ernesto Derbez.
En una evaluación de la gira que realizó por los cuatro países que integran el Mercosur -Brasil, Paraguay, Uruguay y Argentina-, el funcionario destacó el aspecto de que los dos mandatarios vengan de una relación personal vivida en foros sociales latinoamericanos, pues ello permitirá una visión política común sobre el acuerdo, que a los técnicos tocará traducir en acciones concretas.
Agregó más adelante que de su recorrido obtuvo resultados muy positivos. Por ejemplo, manifestó que fue bien recibida la propuesta de que México se integre al Mercosur por parte de los cuatro integrantes del mecanismo, además de que se pudo constatar que la relación bilateral con cada uno de ellos se encuentra en uno de sus puntos más altos, tanto en el ámbito económico, como en el político o el cultural.
Derbez puntualizó que en el periplo realizado observó un reconocimiento al gobierno mexicano por volver los ojos hacia Latinoamérica, no sólo con discursos, sino con hechos y acciones.
Enfatizó que la propuesta mexicana no es integrar un acuerdo comercial con el Mercorsur, sino lograr una adhesión total, lo que implica ir más allá del tema económico y trascender al político, el cultural y el educativo.
De acuerdo con el funcionario, un convenio de este tipo abriría las puertas del intercambio comercial y además garantizaría que los productos fueran recibidos y que se establecieran mecanismos para resolver las disputas.
Entre los beneficios que traería la adhesión, refirió la posibilidad de que México sea plataforma de lanzamiento de productos latinoamericanos que pudieran ser reprocesados en territorio nacional y exportados a Estados Unidos, a Europa o a Japón. Eso daría oportunidades de inversión y de empleo, subrayó.
Por último, destacó que posiblemente sea más fácil la parte política de la
adhesión, que la técnica, pero en ello tendrán que trabajar los expertos. Se prevé que a partir de julio, cuando México formalice su petición ante el Mercosur, en la reunión de líderes que efectuará en esta ciudad, se puedan iniciar las negociaciones sobre el tema.
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