La percepción de seguridad en el DF es negativa, según estudio

Revela la Coparmex que los delitos han bajado en la capital en los años recientes

LAURA GOMEZ FLORES

La Confederación Patronal de la República Mexicana en el Distrito Federal (Coparmex-DF) informó que de las pasadas tres administraciones capitalinas, la presente ha sido la más eficaz para enfrentar el crimen, al reducir el número de delitos diarios de 659 en la época de Oscar Espinosa Villarreal, a 178 actualmente, aunque la percepción de sus habitantes, inversionistas y altos ejecutivos nacionales y extranjeros es que sigue siendo insegura.

En un análisis sobre la seguridad pública, menciona que en algunos municipios conurbados el índice de delitos denunciados es superior al registrado en la capital, con una incidencia de 1.9 por cada cien mil habitantes, contra 2.3 o 2.1 de Tlanepantla o Nezahualcóyotl, aunque se desconoce la magnitud de la "cifra oculta" o delitos que no se denuncian por temor a represalias o nula atención de las autoridades encargadas de resolverlos.

Los delitos con una reducción importante en las anteriores administraciones, incluidas las de Cuauhtémoc Cárdenas y Rosario Robles, cuando se reportaron 585 y 478 incidentes diarios, respectivamente, son: el robo de vehículos, que descendió 41 por ciento; el hurto de transporte de carga, que lo hizo en 73 por ciento, y el secuestro, en 10 por ciento, con un total de 150 durante el año pasado, aunque en 1997 la cifra de plagios denunciados era de 22.

Mientras, el número de delitos intencionales violentos, como el homicidio, robo con violencia, homicidio doloso, lesiones dolosas y violación ascendió a 68 mil 249 casos, es decir, 260 por ciento superior a los niveles registrados en 1982, cuando se reportaron 19 mil incidentes, lo cual "demuestra que el problema de la inseguridad no está resuelto, pese a los avances registrados y se deben aplicar nuevas medidas".

Además de la realización de una encuesta de victimización para determinar la magnitud real de la "cifra oculta" de delitos, tanto en el Distrito Federal como en los municipios conurbados, con la metodología y asesoría de la Organización de Naciones Unidas, y que las autoridades obliguen a la ciudadanía a cumplir con la legislación vigente, para evitar las manifestaciones violentas, los asaltos a instalaciones públicas y los bloqueos de calles.

Con ello se combatiría la inseguridad pública, que es la mayor desventaja comparativa de la ciudad y que la colocó en el pasado reciente en un grado de peligrosidad por arriba de urbes como Cali, ciudad de Guatemala, Caracas o San Salvador, reconocidas por sus niveles de crimen y violencia, afirma.