Está claro que se estrelló en el mar, asegura el especialista Patrick Granjean

Persisten dudas sobre la desaparición de Antoine de Saint-Exupéry

Marsella puede albergar los restos del avión del autor de El principito, anuncia el alcalde

AGENCIAS

Marsella, 7 de abril. Una parte del misterio en torno de Antoine de Saint-Exupéry (1900-1944) quedó aclarada casi 60 años después del vuelo mortal del legendario piloto y escritor francés, sin embargo persisten dudas acerca de ese accidente.

Ayer se informó en este diario que los restos de fuselaje hallados en el Mediterráneo, cerca de Marsella, provienen del avión tipo Lightning P 38 con el que el creador del conocido relato El principito despegó el 31 de julio de 1944 en un vuelo militar de reconocimiento, con base en un informe del Departamento de Investigaciones Arqueológicas Subacuáticas en Marsella.

Hace cuatro años, tras intensas indagaciones en los archivos militares alemanes, se descartó que el avión hubiera sufrido algún ataque.

¿Se trató, por tanto, de un accidente? ¿Hubo problemas de oxígeno a bordo? ¿Tuvo el escritor de 44 años un ataque cardiaco? Tampoco se descarta la posibilidad de un suicidio por problemas de carácter personal.

Tras despegar de Borgo, en Córcega, la nave bimotor desapareció en aquel entonces de las pantallas de los radares de las fuerzas aliadas y nunca más volvió a aparecer. Ese misterioso final generó un mito alrededor del peculiar hijo de una familia noble francesa, autor también de obras como Vuelo nocturno y Tierra de hombres.

Su obra El principito, fábula universal para niños (o para adultos) es uno de los libros más vendidos, después La Biblia y El capital, con 3 millones de ejemplares en Francia, y traducido a 115 idiomas.

Vuelo de un reservista

La desaparición de Sain-Exupéry, quien partió sin decir una palabra, resultó sumamente misteriosa. La noche anterior había regresado tarde a su base.

En realidad, debido a su edad, sólo estaba apuntado como reservista para vuelos con los que los aliados preparaban su desembarco en Provenza. Pero entonces Saint-Exupéry tuvo la oportunidad de volver a volar, y no regresó más.

Un resto del fuselaje que se halló en el otoño de 2003 cerca de la isla de Riou fue identificada como parte del avión del tipo Lightning P 38 de Saint Exupéry.

Ahora está claro que el escritor se estrelló en el mar, después de despegar del norte de Córcega, detalló el experto Patrick Granjean.

Sobre un trozo de metal de un turbo-comprensor hallado se podía leer la cifra ''2734" que, según los documentos de la Fuerza Area de Estados Unidos corresponde al número de matrícula 41-68223 de la nave de Antoine de Saint-Exupéry.

Los restos del fuselaje hallados a 70 metros de profundidad están severamente doblados. La nave debió caer a gran velocidad, como una piedra desde el cielo, consideran especialistas. Cualquier otra parte del avión fue repartida por las redes de arrastre de los pescadores de Marsella durante 60 años sobre la superficie marina.

El alcalde de Marsella, Jean-Claude Gaudin, anunció que los museos de la ciudad están dispuestos a albergar los restos de la aeronave de Saint-Exupéry.