Enfrenta Bejarano críticas de propios y extraños; no respeta acuerdos, acusan

Cisma en la diputación del PRD en la Asamblea; se fragmenta la bancada

Perredistas de CNI y Unyr cuestionan a su coordinador la toma unilateral de decisiones

RAUL LLANOS SAMANIEGO

La fracción del PRD en la Asamblea Legislativa enfrenta hoy uno de sus peores momentos, caracterizado no sólo por la crítica constante de la oposición hacia su coordinador, René Bejarano, por la falta de respeto a los acuerdos políticos, sino por las diferencias internas derivadas de las decisiones "unilaterales" del, al mismo tiempo, dirigente de la Corriente de Izquierda Democrática (CID), que ha llevado a confrontaciones y a llamados públicos a la mesura.

De hecho, los líderes de PAN, PRI y PVEM conformaron un frente común para frenar ese actuar "terco" del presidente de la Comisión de Gobierno, sino que se han entrevistado ya con varios diputados perredistas que también han externado su oposición a las decisiones de Bejarano. De hecho ayer se tenía previsto que el panista José Espina, el priísta Manuel Jiménez y el pevemista Bernardo de la Garza, comieran con Carlos Reyes Gámiz, líder de la Unyr, y con Lorena Villavicencio, de Nueva Izquierda, sólo que el encuentro se propuso a última hora.

Lo que el 17 de septiembre inició como un bloque sólido de perredistas, es hoy una fragmentación de corrientes y grupos. Por un lado, Villavicencio y sus nueve compañeros en la ALDF; Reyes Gámiz, cabeza de otros siete diputados, y un grupo de aliancistas integrado por Guadalupe Chavira, Francisco Chiguil, Alfredo Hernández Raigosa, María Rojo, Gerardo Villanueva, Andrés Lozano y Pablo Trejo, que en conjunto suman 24, han marcado su línea respecto al actuar de Bejarano, quien encabeza seguro a 14 perredistas.

Incluso, se prevé que hoy los legisladores de la CNI y de Unyr firmen un documento en el que expresan su inconformidad con las decisiones "unilaterales" de su coordinador y pedirán "reorientar el camino" y la toma de acuerdos.

Este ambiente de confrontación interna ha generado, además, vacíos a las convocatorias de Bejarano, quien en diciembre pasado propuso -y así se aceptó- reunirse con los diputados diariamente a las ocho de la mañana, sólo que las circunstancias han incidido en una ausencia constante, a grado tal que ayer sólo asistieron Aleyda Alavez, Maricela Contreras y Rodrigo Chávez.

Baste mencionar que los temas que más han desgastado la relación en la fracción son la Ley de Participación Ciudadana, reformas con las cuales no han estado de acuerdo los de CNI y Unyr; en el caso de Comunicación Social, algunos perredistas han llegado a solicitar la renuncia de su titular, Guadalupe Báez, además de los temas de la Contaduría Mayor de Hacienda, donde se ha metido el coordinador del PRD "para apoyar la relección de María de la Luz Mijangos" -según expresan diputados de esa fracción-, lo relacionado con el Consejo de Transparencia y la propuesta de Bejarano de apoyar a Gustavo Velásquez para que lo presida.

Varios añoran los acuerdos, los equilibrios internos y hacia la oposición, que buscaba construir el coordinador perredista, pero consideran que si ahora no hay voluntad de corregir la situación, de reorientar las negociaciones y los consensos, se perderán muchas cosas en la Asamblea Legislativa.