México D.F. Sábado 28 de febrero de 2004
Bush y Schroeder se reconcilian
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, y el canciller federal alemán, Gerhard Schroeder, dejaron atrás este viernes sus profundas diferencias sobre la guerra contra Irak, pero el gobernante alemán puso sobre la mesa un nuevo problema: la debilidad del dólar frente al euro.
"Hemos tenido diferencias en el pasado, pero no hay nada de malo en que los amigos tengan divergencias y ambos estamos comprometidos a dejalas atrás", indicó Bush a los periodistas en una conferencia de prensa con Schroeder en la Casa Blanca.
Schroeder añadió que le expresó a Bush las preocupaciones de Alemania sobre la debilidad del dólar frente al euro, algo que Berlín considera está afectando sus exportaciones.
La posición oficial de Estados Unidos es apoyar la política del dólar fuerte. Sin embargo, el dólar débil ha ayudado a Washington a lidiar con su déficit fiscal sin precedentes, porque las exportaciones estadunidenses son más baratas en los mercados extranjeros y se comercializan mejor.
Schroeder explicó que Bush le dijo que está interesado en un dólar fuerte, pero le recordó que los gobiernos sólo tienen una posibilidad limitada de influir sobre las monedas.
Alemania ayudó a congelar una resolución sobre Irak presentada por Estados Unidos, que Bush quería que obtuviera el apoyo internacional, pero el mandatario estadunidense estaba molesto desde hacía tiempo con Schroeder, quien en su campaña para la relección en 2002 hizo de la oposición a la guerra uno de sus elementos centrales. Esta fue la primera visita de Schroeder a la Casa Blanca en más de dos años. (REUTERS)
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