Los panistas, de Mireya Cuéllar, traza ''pinceladas'' sobre personajes del poder

Carece el PAN de un intelectual o grupo de sustento ideológico para su acción política

ARTURO JIMENEZ

Tras la muerte de Carlos Castillo Peraza, dentro del Partido Acción Nacional (PAN) se carece de un intelectual o de un grupo que den sustento ideológico a su acción política cotidiana.

Pero esa discusión sobre cuál es el camino a seguir también es una carencia de los otros grandes partidos: el Revolucionario Institucional (PRI) y el de la Revolución Democrática (PRD).

Los anteriores son planteamientos de la periodista Mireya Cuéllar, quien el martes presentó su libro Los panistas (La Jornada Ediciones), dentro de la Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería.

Acompañada por Andrés Ruiz, integrante de esta casa editorial, y de Juan Ignacio Zavala, vocero del PAN, Cuéllar mencionó que, por ejemplo, Castillo Peraza logró articular todo un discurso teórico en favor de las controvertidas concertacesiones.

Y es que, unos minutos antes, Zavala había discrepado de la reportera de La Jornada porque en su libro se refiere a Castillo Peraza como ''el último intelectual del PAN".

Sin embargo, reconoció que en su partido, ''por el momento", nadie brilla de la forma en que lo hizo Castillo Peraza.

Entre otros ''excesos de subjetividad" y carencias que Zavala observó en el libro de Cuéllar figura la falta de información en algunas de las más de 600 fichas.

Un ejemplo es el de Luis H. Alvarez, de quien no se abunda sobre los problemas que enfrentó en su campaña presidencial de 1958, dijo Zavala, cuya ficha también aparece en Los panistas.

Cuéllar argumentó que, aunque uno de los objetivos principales de las fichas es informar, en el caso de Alvarez la atención se centró en su labor de acercamiento del PAN con el nuevo gobierno de Carlos Salinas, urgido de legitimidad.

En el libro también se buscan trazar algunas ''pinceladas" sobre ciertos personajes para poder dibujarlos ante el lector, agregó la reportera.

Zavala consideró relativas las denominaciones de militantes ''doctrinarios" y ''neopanistas". Y dijo que, ''con aciertos y errores", el libro de Cuéllar informa sobre ''lo que somos los panistas".

Una visión crítica

Para Mireya Cuéllar Los panistas es, en esencia, un libro de consulta para saber quiénes son los integrantes de esa nueva clase política que ha tomado el poder y cuyos integrantes eran desconocidos para casi toda la ciudadanía.

El abordaje de los casos, comentó, es desde la visión personal de la autora y desde la posición del periodismo crítico que ejerce La Jornada.

No se trata de la ''historia oficial" del panismo, señaló, y agregó que, de hecho, se tuvo cuidado de dar una lectura política a la información recabada.

Destacó también la negativa a otorgar información de muchos dirigentes panistas, algunos de ellos miembros del Consejo Nacional, pese a que los partidos funcionan con presupuesto público.

Al contestar una pregunta del público sobre qué había encontrado en su investigación, Cuéllar hizo un recuento y dijo que en un principio fue un PAN de intelectuales alrededor de Manuel Gómez Morín.

Después, prosiguió, vino una etapa dominada por grupos católicos que redujeron los horizontes del partido. Más adelante, llegó Adolfo Christlieb Ibarrola, quien vio la necesidad de marcar distancia y reclutar otro tipo de militantes.

El último momento, el del predominio de los empresarios, comenzó con la dirigencia de José Angel Conchello y se ha consolidado en el presente, con la toma del poder presidencial.

En su intervención, Andrés Ruiz reubicó varias cosas, destacó la importancia de Los panistas, la pasión de su autora por la historia y planteó las preguntas básicas que responde dicho libro:

ƑQuiénes son los hombres y mujeres detrás de esos nombres que ahora detentan el poder? ƑCuáles son sus trayectorias, matrices ideológicas, formación y accionar político? ƑA qué grupos y alianzas pertenecen? ƑQué cargos habían ocupado en los gobiernos estatales y municipales, y en la jerarquía partidista?