Está presente en la zona rural, en pueblos y colonias: diputado Gilberto Ensástiga

Invade a Tláhuac el narcomenudeo

En plena plaza principal es fácil conseguir una grapa a mediodía, asegura un comerciante

SUSANA GONZALEZ G.

Entre fuereños o lugareños de Tláhuac, habitantes de la zona urbana o de los pueblos y el área rural, las distinciones no importan porque la venta y el consumo de droga han llegado a todos y complican aún más el problema de la inseguridad en la demarcación.

"La inseguridad y las drogas nos han ido ganando territorio. El narcomenudeo es generalizado en la delegación, y está presente en la zona rural y en las colonias que hay alrededor de los pueblos, que no son susceptibles de tener servicios porque están en zonas de conservación ecológica", alertó Gilberto Ensástiga, diputado federal del PRD y habitante de Tláhuac.

Aun cuando se trate de zonas aisladas, dijo, hay denuncias ciudadanas sobre casos de distribución de droga. El problema no es atribuible a gente ajena a Tláhuac, porque ya se ha detectado que personas que radican en la demarcación han optado por convertirse en vendedores de droga, agregó.

Las grapas también se consiguen fácilmente, a mediodía, en la plaza principal de Tláhuac, siempre concurrida porque ahí se asientan la iglesia, la sede delegacional y una de las dos coordinaciones territoriales de seguridad pública y procuración de justicia que existen en la demarcación (con una agencia del Ministerio Público y un cuartel de la policía preventiva).

"Aquí se pone un chavo que vende, y desde que comenzó a venir me dijo: Tú no te metas conmigo y yo no me meto contigo. No te voy a perjudicar, así que cada quien su negocio. Y uno Ƒqué puede hacer? Si se pasean enfrente de los policías y ellos no hacen nada, menos uno, que sólo tiene este trabajo para vivir", comenta un vendedor que desde hace cinco años se instala en la plaza.

Ensástiga coincide: "nosotros no podemos meter las manos al fuego por los policías, porque ellos saben dónde está la droga y quiénes son los distribuidores, y en algunos casos podemos decir que son omisos". Pese a la gravedad del problema, acotó que la distribución, venta y consumo de droga se padecen más en las colonias colindantes a los pueblos.

El incremento de los delitos cometidos en Tláhuac provocó que organizaciones vecinales y sociales emprendieran esta semana una campaña de recolección de firmas en escuelas, mercados, plazas, parques y otros lugares públicos de los siete pueblos de la demarcación, para exigir tanto al secretario de Seguridad Pública, Marcelo Ebrard, como al procurador Bernardo Bátiz más vigilancia, recursos y eficacia para abatir la delincuencia.

La campaña arrancó el lunes pasado y concluirá en dos semanas. La demanda es una: "No más inseguridad en Tláhuac", donde la incidencia delictiva ha crecido de manera alarmante en los tres años recientes.