La Española, a la deriva

La Española es un caso único en el continente de una isla con dos estados, ambos muy pobres. Por esta razón los dominicanos mantienen en estos días todas sus alertas encendidas. Desde el opositor Partido de la Liberación Dominicana se advierte que un conflicto postelectoral en el lado hispanoparlante de la isla, sumado al derrumbe institucional que hoy vive Haití, podría generar una crisis regional.

Juan Bosch, líder histórico de los socialistas dominicanos, decía: "La democracia es el traje político de un modelo económico llamado capitalismo". Y en este sentido, los dirigentes del PLD ven la actual crisis haitiana como un conflicto de raíz económica.

Ante la deriva de la otra mitad de la isla, los dirigentes del PLD abogan por una política de respeto a la autodeterminación de sus vecinos. No se pronuncian ni por la caída ni por la permanencia del presidente Jean Bertrand Aristide en el poder, aunque opinan que fue un dirigente que no supo colmar las enormes expectativas que despertó en su pueblo.

Aseguran que el ejército dominicano no tiene interés alguno en alentar la inestabilidad de su vecino y que la militarización de la frontera común fue únicamente con fines preventivos. Normalmente el paso de haitianos y dominicanos por la frontera común es intensa, pero es República Dominicana la que carga con el peso de la migración, ya que se calcula que en la parte occidental de la isla viven aproximadamente un millón de haitianos. Una crisis humanitaria podría detonar un éxodo imparable. BLANCHE PETRICH