Lo remplaza ejecutivo de un grupo controlado por militares

Cesan al ministro de Turismo cubano; versión de presuntas irregularidades

GERARDO ARREOLA CORRESPONSAL

La Habana, 11 de febrero. El ministro de Turismo, Ibrahim Ferradaz, fue cesado en sus funciones y remplazado por un ejecutivo del grupo Gaviota, controlado por las Fuerzas Armadas, semanas después de que circularon versiones sobre prácticas irregulares y severas medidas de control disciplinario en el sector.

El diario oficial Granma informó hoy que Ferradaz, de 54 años, fue sustituido por el arquitecto Manuel Marrero Cruz, de 40, quien era presidente ejecutivo del grupo turístico Gaviota, uno de los conglomerados económicos controlados por los militares.

El comunicado de apenas dos párrafos dispensó el trato de "compañero" a Ferradaz y anunció que "le serán asignadas otras responsabilidades", lo cual significa -en el críptico lenguaje oficial cubano-, que en principio el ministro depuesto no tiene cuentas pendientes ni se ha criticado su desempeño personal.

Ferradaz llegó a la cartera de Turismo en 1999, tras dirigir durante los cuatro años anteriores la de Inversión Extranjera y Colaboración Económica.

La nota señaló que la designación fue realizada por el Consejo de Estado a propuesta del Buró Político del Partido Comunista de Cuba, ambos organismos encabezados por el presidente Fidel Castro.

Granma dijo que Marrero tiene trayectoria en el sector, donde ha laborado durante más de una década en tareas de inversión, manejo de hoteles y dirección regional.

El turismo sustituyó al azúcar como la principal industria del país y la mayor fuente de ingresos en divisas. Como en el resto del mundo, el sector se contrajo en Cuba entre 2001 y 2002.

Pero el propio Ferradaz informó la semana pasada a un congreso universitario que la industria retomó en 2003 el ritmo ascendente, con un alza de 13 por ciento y 1.9 millones de vacacionistas. Los principales mercados son Canadá, Italia, Alemania, Francia, España, Gran Bretaña y México.

El Ministerio de Turismo confirmó en diciembre pasado versiones de que varios altos dirigentes de Cubanacán, el principal grupo empresarial del sector, fueron destituidos de sus cargos por "graves errores en su trabajo de dirección, asociados a falta de exigencia y control, y otras violaciones que, aunque son práctica normal para ejecutivos en casi todo el mundo, no se ajustan a las severas normas que rigen la conducta de los dirigentes y funcionarios cubanos".

Fuentes del medio indicaron que detrás de ese episodio estaba la existencia irregular de cuentas bancarias en el extranjero y el cobro de comisiones.

El ministerio dijo que Ferradaz había asumido personalmente la dirección de Cubanacán, de cuya situación no hay desde entonces ninguna precisión oficial y pública.

A los sucesos en Cubanacán siguió el fin de año una drástica sucesión de revisiones administrativas y laborales en el sector, al parecer destinadas a reforzar el control sobre los activos de la industria.