No son tiempos para definir candidatos, sino para confrontar ideas, señala

Cárdenas: Fox ha sido incapaz de resolver los problemas nacionales

El ex candidato presidencial perredista Cuauhtémoc Cárdenas afirmó en la Universidad de Oxford que el voto en los comicios de 2000 no sólo fue para sacar al PRI del gobierno, sino para cambiar todo lo que este régimen representaba. Sin embargo, señaló que después de transcurrida la mitad del periodo foxista sigue sin resolverse el conflicto en Chiapas, la pobreza va en aumento y la migración hacia Estados Unidos se ha convertido en un flujo continuo.

Ante esta situación, el ex jefe de Gobierno del Distrito Federal dijo que los tiempos políticos actuales no son para definir candidatos, sino para presentar y confrontar ideas, no para discutir trayectorias pasadas y sólo en función de ellas construir agrupamientos, sino de hacer propuestas y establecer compromisos hacia el futuro.

Luego de hacer un recuento histórico sobre los avances en la democratización del país, manifestó su desacuerdo con el planteamiento de que el neoliberalismo ha fracasado en México y en otros países de América Latina.

"El neoliberalismo no ha fracasado, porque nunca se propuso un mejoramiento social general ni el desarrollo de todas las economías, con beneficios equitativos derivados de los múltiples intercambios internacionales", afirmó en su exposición ante integrantes de la Sociedad Mexicana de la Universidad de Oxford.

Señaló que, en cambio, se propuso, y lo ha logrado, concentrar la riqueza cada vez más y cada vez en menos manos, subordinar las economías de los países en desarrollo a los intereses que dominan las finanzas y la política de Estados Unidos y de las demás potencias económicas, mantener un flujo de migrantes de los países periféricos hacia los centrales como fuente de mano de obra barata.

En México, subrayó, el gobierno actual ha apoyado y hecho suyas sin reservas las políticas del neoliberalismo, las mismas de los tres gobiernos priístas anteriores, y los resultados que está ofreciendo al país son, consecuentemente, similares a los de los gobiernos pasados.

En la conferencia que dictó el martes pasado, Cárdenas criticó la gestión del presidente Vicente Fox. Indicó que a la mitad de su periodo da la impresión de que para él ya terminó su gestión, que lo que pudo hacer hecho está y lo pendiente tendrá que esperar a la próxima administración, que habrá de llegar el primero de diciembre de 2006.

Además, continuó, el jefe del Ejecutivo ha expresado su beneplácito porque se haya iniciado ya la carrera hacia la sucesión presidencial, lo que ha venido a fortalecer la sensación de que él considera que su gestión ha concluido y que sólo espera con ansiedad el relevo.

Dijo que esas declaraciones han despertado inquietud en todos los partidos políticos. Sin embargo, añadió, las decisiones sobre candidaturas y las elecciones mismas están aún muy lejanas, pues no habrán de darse sino hasta el último tercio del año. Por ello, insistió en que es momento de elaborar un proyecto nacional que se conozca y discuta con amplitud, para que quienes aspiren a conducir el esfuerzo constructivo de nación expongan sus ideas y se incorporen al debate nacional.

Este gobierno, y en particular el Presidente, planteó, han carecido de iniciativa y de capacidad para conducir el país a mejores situaciones. "En el gobierno se carece de sensibilidad, se abusa de frivolidad y de la improvisación, no se buscan alternativas para mejor enfrentar los problemas y no existe flexibilidad", añadió.

Refirió que el conflicto de Chiapas ha cumplido 10 años y el gobierno foxista, el tercero desde la aparición del EZLN, no ha tenido la capacidad o ha carecido de voluntad para buscar y, en su caso, encontrar solución al problema y lograr la aprobación de una ley de derechos y culturas indígenas aceptable para los indios no sólo de Chiapas, sino de todo el país.

La pobreza, agregó, sigue en aumento. Durante los tres años de esta administración el poder adquisitivo del salario se ha reducido 14.5 por ciento, la pérdida de empleos está en el orden de los 600 mil y la economía se mantiene sin crecimiento.

Además, prosiguió, prevalece la migración de mexicanos hacia Estados Unidos. Durante las pasadas décadas, de 350 mil a 500 mil mexicanos (más de mil diarios) cruzan la frontera para quedarse a trabajar en el vecino país, donde se estima que existen ya alrededor de 27 millones de connacionales o personas de origen mexicano