.. |
México D.F. Lunes 26 de enero de 2004
MEXICO SA
Carlos Fernández-Vega
Canales, empresario al que no le salen las cuentas del desempleo
México, paraíso, pero para los delincuentes de cuello blanco
FELIZ SE ENCUENTRA EL secretario de Economía porque, como afirmó el pasado jueves, "se empieza a ver un regreso" de empresas maquiladoras "que abandonaron México para instalarse en otros países como China", una nación delirante para él.
PARA LA ARITMÉTICA DEL "cambio" -la que siempre suma, nunca resta- cualquier cosa es motivo de celebración. De hecho, en abril de 2003 el propio Fernando Canales Clariond -con poco menos de tres meses en el puesto- festejaba que "cuatro maquiladoras que se fueron a China ya regresaron a México", con lo que, afirmaba, "se van a poder recuperar empleos (y) no deja de ser significativo: 2 mil por cada una".
ESAS CUENTAS ALEGRES fueron divulgadas por el empresario metido a "político" cuando paralelamente decidió mostrar en público sus dotes de diplomático: "Con todo respeto, China no es un país democrático, no hay respeto a los derechos humanos, no es un país con instituciones políticas y económicas sólidas de largo plazo".
NADIE SABE SI, EN EFECTO, esas cuatro empresas reinstalaron sus fábricas en México, pero lo cierto es que la felicidad de Canales Clariond ejemplifica la "metodología" utilizada por el gobierno del "cambio" para evaluar los resultados por él obtenidos durante su ejercicio.
PARA LA SENSIBLE aritmética del "cambio", que cuatro arrepentidas empresas maquiladoras retornen cabizbajas a territorio nacional es motivo más que suficiente para decretar fiesta nacional, encender la pirotecnia del triunfalismo retórico y "demostrar" que México siempre será más atractivo que China, su pasión.
EL EFUSIVO EMPRESARIO Canales Clariond "olvida" un pequeño detalle: en el primer trienio de la administración foxista unos 900 consorcios maquiladores (877 hasta octubre pasado, para ser preciso) cerraron sus puertas, recogieron sus tiliches, cancelaron miles de empleos y abandonaron este atractivo país para reinstalarse en naciones centroamericanas y asiáticas, entre estas últimas la apasionante China.
CUANDO EL PRIMERO DE diciembre de 2000 arrancó -si el término es aplicable- la administración del "cambio", el padrón oficial de la industria maquiladora instalada en el país registraba 3 mil 703 consorcios, que empleaban a un millón 334 mil 263 trabajadores, de acuerdo con las cifras del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI).
TRES AÑOS Y CIENTOS DE festejos después -hasta octubre de 2003-, dicho padrón se había desplomado a 2 mil 826 consorcios (una caída de 25 por ciento en el periodo) y su plantilla laboral a un millón 69 mil 911 trabajadores, (20 por ciento), es decir, 264 mil 352 empleos cancelados.
LO ANTERIOR EXPLICA POR qué Canales Clariond prefiere festejar el eventual regreso de cuatro empresas maquiladoras en abril de 2003 y que otras pocas supuestamente lo estén haciendo en enero de 2004. Es la filosofía del "cambio". Por ello, es fácilmente entendible que el presidente Fox, con una enorme sonrisa, refiera que la tasa de desempleo abierto en México reporta un nivel "muy razonable" y que es "muy inferior" a la de Estados Unidos, América Latina y/o el resto de naciones, y por qué el barco (para citar un clásico martiano -de Marta, no de Martí-) está medio a flote y no medio hundido, todo ello aderezado por los disparates de otros integrantes del gabinetazo.
DE CUALQUIER SUERTE, lo importante es que Canales Clariond esté feliz por el (eventual) regreso de "empresas maquiladoras" -así, en genérico-, que humildes retornan a territorio nacional a seguir haciendo de las suyas, con la bendición gubernamental, porque prefieren explotar mexicanos y no chinos o centroamericanos.
EJEMPLO DE LO ANTERIOR es la denuncia que en nombre de mil 200 empleadas (80 por ciento del total) y empleados hizo contra Confecciones Monclava -instalada en ciudad Frontera, Coahuila-, la representante de la asociación civil Sedepac, Gloria Tello Sánchez: despidos injustificados (por embarazo, entre ellos), hostigamiento sexual, bajos sueldos (325 pesos por jornadas semanales de 45 horas) y represión por demandar derechos laborales.
CONFECCIONES MONCLAVA ES una maquiladora filial de la trasnacional Sara Lee (Playtex, Wonderbra, Rinbros, DKNY; pastelería Zwan y Kir, entre otras marcas), que viola el derecho a la libre organización: "impide la libertad sindical, en complicidad con la CTM. Desde hace más de dos años la base trabajadora se ha organizado para defender el derecho a la representación sindical, vacaciones, aguinaldos, contra el trabajo en días festivos, por el transporte para los ejidos, y porque se mantenga la fuente de empleo, pues la empresa amenaza con salir de ciudad Frontera, sin preocuparse por los derechos de quienes trabajan en la planta".
ADEMAS, "LAS AUTORIDADES de Trabajo incumplen su obligación de vigilar el acatamiento de las normas de salud, lo que ha derivado en enfermedades profesionales, como el túnel carpiano, tendonitis, asma bronquial, asma crónica, dolores musculares y daños en otras partes del cuerpo por el tipo de trabajo que ahí se realiza''.
SARA LEE TIENE OTRAS plantas en Coahuila, y el año pasado cerró una ubicada en Nueva Rosita, dejando en el desempleo a 400 trabajadoras sin pagarles indemnización. La trasnacional, de capital estadunidense, opera en 55 países, sus productos se venden en más de 200 y en ella laboran 155 mil trabajadores.
COMO EL CITADO, EXISTEN miles de casos que atentan contra los trabajadores de la industria maquiladora... pero "ya vienen de regreso".
Las rebanadas del pastel:
MÉXICO, NI DUDA CABE, es el paraíso... para los delincuentes de cuello blanco. Radiantes, libres y de regreso en el "negocio de las inversiones" se encuentran muchos Cabales, Divinos y conexos, gracias a la "justicia" mexicana y a la decidida acción de la autoridad... A la paradisíaca lista se ha incorporado David Peñaloza, ex presidente de Tribasa, ex concesionario carretero, ex accionista de la banca reprivatizada y amigo fiel del Fobaproa, quien años atrás huyó del país porque Nacional Financiera lo demandó por fraude a la nación... Más tardó en regresar a México que en quitarse de encima la acusación: "Nafin -que dirige Mario Laborín, ex directivo de Bancomer- le otorgó el perdón en un presunto fraude que llegó a sumar más de 200 millones de dólares, con lo cual se extingue toda posibilidad de enjuiciarlo por el delito de fraude genérico" (El Universal). [email protected]
|